La construcción del primer parque temático basado en Dragon Ball comenzó en 2024 y su inauguración está prevista para 2027. Este proyecto forma parte del crecimiento del mercado del anime a nivel mundial, que se ha convertido en un atractivo para las grandes inversiones. Dragon Ball, una de las franquicias más reconocidas e influyentes del género.
El parque será el primero en el mundo completamente dedicado a la obra del mangaka Akira Toriyama. Con una superficie superior a los 500.000 metros cuadrados, estará dividido en siete zonas temáticas. Cada una de ellas recreará lugares icónicos del universo de Dragon Ball, entre los que destacan la clásica Kame House, la futurista Capsule Corporation y el misterioso planeta de Beerus, el Dios de la Destrucción.
Entre las más de treinta atracciones que se están diseñando para este parque, se incluirán hoteles y restaurantes tematizados. La atracción principal promete ser una montaña rusa construida dentro de una figura de Shenron, el dragón sagrado, que medirá aproximadamente 70 metros de altura.
El director del proyecto Qiddiya, Abdullah Al-Dawood, destacó la creciente popularidad del anime en Arabia Saudita. Según sus declaraciones, el 80% de la población consume anime de forma regular y alrededor del 40% ya ha visto Dragon Ball.
Este parque temático no estará aislado, sino que será una pieza clave dentro del gran proyecto Qiddiya, una iniciativa que busca transformar a Arabia Saudita en el centro internacional del ocio, la cultura y el deporte. Qiddiya será una de las grandes apuestas del país en el marco de la Visión Saudí 2030, que tiene como objetivo diversificar su economía y promover nuevas formas de entretenimiento para las futuras generaciones.
El Dragon Ball Theme Park se presenta como una extensión de la tendencia global de crear parques de atracciones basados en franquicias populares. Al igual que los exitosos complejos de Disney o el Super Nintendo World dedicado a Mario Bros, este parque se apoya en un universo narrativo con millones de seguidores en todo el mundo. Así, se suma a una nueva generación de experiencias inmersivas que no solo entretienen, sino que permiten a los visitantes formar parte activa de sus historias favoritas.
