Este verano, la Premier League no ha fichado a quien cabría esperar. En lugar de un delantero estrella o un extremo que bata récords, ha fichado a Microsoft.
El 1 de julio, la principal liga de fútbol de Inglaterra anunció una colaboración de cinco años con el gigante tecnológico para crear algo más potente que un vídeo destacado: una herramienta de inteligencia artificial (IA) en vivo que ofrece a cada aficionado actualizaciones e interacciones personalizadas.
Premier League Companion es un asistente virtual integrado en la aplicación de la liga. Los aficionados pueden preguntarle cualquier cosa, como «¿Cuántos goles ha marcado Cole Palmer después del minuto 60?» o «¿Debería empezar con él en el fantasy esta semana?». Tendrán una respuesta, gracias a décadas de datos de partidos, vídeos y análisis empaquetados en una interfaz de estilo chat.
«Esta asociación nos ayudará a interactuar con los aficionados de nuevas formas, desde contenidos personalizados hasta información sobre los partidos en tiempo real», ha declarado Richard Masters, director ejecutivo de la Premier League. «Estamos deseando trabajar juntos [con Microsoft] durante los próximos cinco años para ofrecer experiencias más innovadoras a todos los seguidores de la Premier League en todo el mundo».
Un analista de banda potenciado por IA
El Companion se lanzará antes de la temporada 2025-26. Se ejecuta en las herramientas Azure OpenAI de Microsoft y se vincula a las bases de datos oficiales de la liga, ofreciendo a los aficionados una guía multilingüe de búsqueda para todo, desde las estadísticas de los jugadores hasta las tácticas de los equipos.
Los aficionados al fútbol fantasy reciben consejos personalizados. Los ocasionales pueden acceder a momentos históricos. Todo el mundo obtiene un acceso rápido y sencillo a lo que antes quedaba enterrado en las páginas de estadísticas y las bromas de los comentaristas.
Pero no se trata sólo de estadísticas. Esta iniciativa forma parte de una tendencia cada vez más extendida en el mundo del deporte y el espectáculo, que recurren a la IA para mantener a los espectadores en sus aplicaciones y alejarlos de TikTok, Reddit y otros rastreadores de resultados.
La carrera de armamentos tecnológicos en el deporte
En todo el mundo, las ligas están experimentando con herramientas similares.
Wimbledon e IBM lanzaron Match Chat, que responde a las preguntas de los aficionados durante los partidos y muestra las probabilidades de victoria en tiempo real. LaLiga creó Beyond Stats, que utiliza millones de datos por partido para crear gráficos personalizados y visuales predictivos.
La Major League Soccer presentó Sidekick, una IA integrada en la aplicación que aprende los hábitos de cada usuario y ofrece vídeos de los partidos e incluso ofertas de entradas. La Major League de béisbol está impulsando My Daily Story, un resumen en vídeo editado por la IA y creado en torno a lo que cada aficionado quiere ver.
Un juego de negocios, no un juguete
Estas herramientas no son sólo funciones. Son estrategias para mantener a los aficionados dentro de las aplicaciones oficiales. Y pueden funcionar.
El papel de Microsoft va más allá de impulsar un chatbot. Sus servicios en la nube gestionan los datos de los aficionados, automatizan los flujos de trabajo y ayudan a la liga a personalizar los contenidos a gran escala. Si preguntas a Copilot por el estado de forma de un jugador, no te sorprendas si poco después te ofrece entradas o un objeto coleccionable. Cada consulta es una pista, y una venta potencial.
Se ha pasado de mirar a interactuar. Los aficionados pasan más tiempo en la aplicación. Los equipos obtienen mejores datos. Los patrocinadores llegan a audiencias más comprometidas. Si las herramientas funcionan, todos ganan.
El juego limpio se une a la rapidez de los datos
Hay otra cara de la moneda. ¿Qué ocurre si la IA se equivoca en una estadística? ¿O si un error de traducción provoca una tormenta en las redes sociales?
Microsoft dice que está abordando estos riesgos. Companion extrae las respuestas de fuentes verificadas de la Premier League mediante un sistema de generación de recuperación aumentada. El volumen de consultas de los aficionados el fin de semana de la inauguración pondrá a prueba estos sistemas.
Luego está el aspecto competitivo. Si los aficionados pueden hacer estas preguntas, ¿pueden los equipos utilizar las mismas herramientas para la búsqueda de talentos? ¿Para preparar los partidos? Algunos creen que la IA igualará las condiciones. A otros les preocupa que aumente la brecha entre los clubes con personal experto en tecnología y los que no.
En privado, algunos entrenadores ya se preguntan si tendrán su propia versión con información que los aficionados no vean.
Para las cadenas de televisión, se trata de una llamada de atención. Con un toque, los aficionados recibirán explicaciones sobre tácticas urgentes o actuaciones anteriores de los jugadores. Esto empuja a las cadenas a mejorar su juego de segunda pantalla o arriesgarse a quedarse atrás.
El Comité Olímpico Internacional planea utilizar la IA para convertir 11.000 horas de metraje en clips de lo más destacado de los Juegos de Invierno de 2026. Es el tipo de manual que Sky o NBC podrían copiar.
Lo que viene: Una identidad, una experiencia
Esto es sólo el principio. Los responsables de la Liga insinúan que las futuras actualizaciones podrían incluir superposiciones de datos en tiempo real en los estadios, comentarios de audio en varios idiomas o repeticiones de partidos clásicos generadas por la IA.
¿La visión a largo plazo? Un perfil de aficionado que funcione en todos los puntos de contacto, ya sea viendo el partido en casa, animando en el estadio o eligiendo un equipo de fantasía. Dondequiera que estén los aficionados, la liga quiere estar preparada con la información, la oferta y la historia adecuadas.
Y si funciona, otros le seguirán. Wimbledon ya está introduciendo la jerga del tenis en su propia inteligencia artificial. La MLB está perfeccionando el vídeo en formato de bocado para las generaciones más jóvenes. La verdadera carrera ahora es por la confianza. El que consiga ganarse esa confianza con la IA y el que convierta esa confianza en fidelidad.
