JPMorgan da un paso más en su apuesta por el mercado español de grandes patrimonios. El banco ha designado a Pablo López Medrano como nuevo director general de Banca Privada en España, colocándolo al frente de su estrategia con clientes ultrarricos en el país. La decisión marca el inicio de una nueva etapa para la división, que se ha consolidado como una de las más relevantes dentro del panorama financiero español.
López Medrano, con una trayectoria de 15 años dentro de la entidad, sustituye a Borja Astarloa, quien ha sido promocionado para liderar el área de Inversores en Europa, Oriente Medio y Asia (EMEA). Se trata de un movimiento que refleja el dinamismo del banco y su intención de reforzar su presencia internacional sin perder foco en mercados estratégicos como el español.
Hasta ahora, López Medrano era uno de los banqueros más influyentes dentro del equipo local de JPMorgan, con una sólida cartera de clientes y una reputación forjada en base a la gestión personalizada de grandes patrimonios. Con este nombramiento, el directivo asume el reto de seguir impulsando el crecimiento de la división en un entorno de alta competencia, donde JPMorgan es referencia para clientes con activos financieros superiores a los 10 o 15 millones de euros.
Aunque el banco no publica cifras oficiales sobre el volumen que gestiona en España, fuentes del sector estiman que supera los 15.000 millones de euros, posicionando a JPMorgan como la principal entidad extranjera especializada en grandes fortunas en el país.
La salida de Borja Astarloa del mercado español no implica una ruptura con su legado. Tras casi tres décadas en el banco y ocho años liderando la unidad en España, Astarloa deja una división fortalecida y en crecimiento constante. Bajo su liderazgo, la banca privada de JPMorgan en España ha mantenido un ritmo de expansión cercano al 10% anual y ha diversificado su oferta con nuevas áreas de inversión, como el sector inmobiliario y la tecnología.
Ahora, la meta es aún más ambiciosa. El último plan estratégico de la entidad contempla alcanzar un volumen de activos gestionados de unos 30.000 millones de euros en los próximos cuatro años. Una cifra que, de lograrse, supondría un récord para una firma internacional en el país.
Con López Medrano al mando, JPMorgan refuerza su apuesta por el cliente de alto patrimonio en España, un segmento que sigue mostrando oportunidades pese a la volatilidad global.
