A pesar de todos los beneficios del networking, una de cada cuatro personas no lo intenta. Además de tener agendas apretadas, algunas lo evitan por timidez, miedo al rechazo o simplemente por no saber cómo iniciar conversaciones sin sentirse incómodas.
Mucha gente empieza con «¿A qué te dedicas?». Si bien funciona, se usa demasiado y resulta un poco transaccional. Además, es una pregunta difícil de responder, sobre todo cuando aún estás calentando motores o te ven obligado a compartir lo que haces en pocas palabras.
Si tienes que preguntar o responder a esa frase inicial, no hay problema. Pero hay
maneras más naturales y menos convencionales de iniciar conversaciones y construir conexiones más significativas. Aquí tienes tres formas de iniciar conversaciones que hacen que el networking sea más fácil y agradable.
¿Qué esperas conseguir hoy?
Esta pregunta es más que un simple inicio de conversación. Ya estás dejando atrás la típica frase inicial predecible y superficial para adoptar una más sincera y atractiva. Querrás comprender y valorar su propósito al asistir al evento.
Preguntarles qué esperan obtener del día los inspira a contar sus historias. Por ejemplo, podrían decir: «Últimamente me he sentido estancado, así que estoy intentando explorar diferentes oportunidades profesionales». Otros podrían decir: «Espero conocer gente con la que pueda colaborar en un proyecto que he querido hacer».
¿Cómo te enteraste de este evento?
Esta pregunta facilita la conversación, ya que estás entre un grupo de desconocidos. Si alguien los ha invitado a este evento, es más fácil romper el hielo y hacer preguntas sencillas de seguimiento. Por ejemplo, ¿cómo conocen a la persona? ¿Cuánto tiempo hace que se conocen? ¿Cómo les ha influido personal o profesionalmente? Así, conocerás su trayectoria y su red de contactos.
Si dicen que no conocen a nadie, ¡acabas de conseguir un compañero para el evento! Los grandes eventos de networking pueden ser abrumadores, sobre todo para las personas tímidas . Así que encontrar a alguien que también esté solo es una oportunidad para conseguir un amigo por un día y disfrutar al máximo del evento.
Podéis disfrutar de unas copas y aperitivos juntos, explorar los stands o intercambiar ideas después de la charla de los ponentes. Como ya tienen un compañero, será más fácil conocer a otras personas. ¿Quién sabe? Tu círculo de hoy podría crear conexiones a largo plazo e incluso más oportunidades profesionales.
¿Qué es algo que te ha entusiasmado últimamente?
Tus preguntas no siempre tienen que estar relacionadas con el evento. Preguntarles
qué les ha entusiasmado les permite elegir de qué hablar. Podría ser un nuevo pasatiempo, un viaje reciente o su libro o programa favorito. Quizás tengan un proyecto que les apasione o una nueva idea de negocio. Quizás estén dando un gran paso en su carrera o empezando un divertido negocio secundario.
A partir de ahí, puedes preguntarles cómo surgieron sus intereses, qué otras cosas les gustaría probar y qué metas buscan alcanzar. Durante la conversación, podrías descubrir algunos trucos profesionales y sentirte más inspirado para seguir tu camino.
Participar en eventos de networking puede ser incómodo e intimidante, sobre todo cuando no se sabe cómo iniciar las conversaciones adecuadas. La clave está en hacer preguntas más sinceras que permitan a las personas compartir sus ideas y experiencias con mayor comodidad.
Al preguntarles sobre sus objetivos del día, a quiénes conocen en los eventos o qué les entusiasma, haces que el networking sea más fácil, natural y ágil. ¡Así que inicia conversaciones reales y deja que las oportunidades fluyan!
