Adecúa tus documentos
¿Buscar trabajo como camarero? Les da igual que tengas un máster. ¿Buscar trabajo como contable? Les da igual si eras el que mejor agitaba la coctelera en aquel bar. Haz el favor de adecuar tu currículum al trabajo para el que postulas y enviarlo junto a una carta de presentación que además de presentarte haga que te quieran conocer.
Establece (buenos) contactos
Networking a tutiplén, eso debes hacer. Eso sí, establece comunicación de forma adecuada: no mendigues trabajo, sé educado si te dan negativas y habla a quien creas realmente susceptible de ser tu futuro empleador. Aspirar a grandes cosas siempre es bueno, pero tampoco vayas de temerario por la vida: fíjate objetivos realistas.
Mejora tus dotes comunicativas y tu imagen
El mundo es muy pequeño y nunca sabes dónde vas a encontrar a tu próximo empleador, así que deberías cuidar tu forma de comunicarte tanto online como offline. Saber expresarse y causar buena impresión son dos cosas muy importantes a la hora de buscar un empleo. Tenlo muy presente.
Llévate bien (o mejor) con las nuevas tecnologías
Tener LinkedIn al día y diseñar un buen currículum son algunas de las cosas que las nuevas tecnologías te permiten y que gustan mucho en las empresas. Las nuevas generaciones vienen pisando fuerte y si no te pones las pilas, pronto te quedarás obsoleto. Es cuestión de renovarse y morir como se suele decir.
Esa empatía, úsala como se merece
Igual ese tipo que acabas de conocer no te cae nada bien pero resulta que es el eslabón perdido de la cadena que te puede unir con la empresa de tus sueños: utiliza tu empatía y cáusale buena impresión. Las relaciones interpersonales son muy importantes. Está feo decirlo, pero los enchufes, aunque no sean directos y necesites pasar alguna prueba, existen y si además eres buen profesional, mejor.