Tras fundar y vender tres empresas en EEUU, ha vuelto a España y lidera desde Madrid las inversiones en su fondo global de más de 100 millones de Euros, LifeX Ventures, especializado en empresas de inteligencia artificial (IA) aplicada a la biosalud. “La IA es la mayor revolución de nuestras vidas y la salud es el sector donde surgirán el mayor número de unicornios en los próximos años”. En dos horas de apasionante conversación, Iñaki Berenguer anticipa tendencias y comparte las claves de su espectacular trayectoria.
Berenguer iba para académico y se define como “un científico convertido en emprendedor tecnológico, y ahora un inversor”, además de consejero independiente. Nacido en el seno de una familia humilde y trabajadora en un pueblo de 9.000 habitantes en el interior de Alicante, su padre nunca había ido al colegio, “pero tenía una mente brillante,” y una devoción por la educación como ascensor social. “Quería que sus hijos sacaran una carrera”. Su madre murió de cáncer cuando él tenía dos años, y su padre se quedó a cargo de cuatro hijos, con 54 años y siendo autónomo, “no era una situación fácil”. Berenguer, que era buen estudiante desde pequeñito y leía biografías de Newton y Stephen Hawking (“eran nuestros podcast de entonces”) estudió Ingeniería y gracias a sus excelentes notas obtuvo una beca de la Fundación La Caixa para estudiar el master y doctorado en Cambridge, “la universidad con más premios Nobel de la historia y donde habían estudiado casi todos los científicos que admiraba”. Finalizado el doctorado, pasó dos años en la Universidad de Columbia con una beca de la Fundación Fulbright y tras trabajar en McKinsey y Microsoft, la Fundación Rafael del Pino le concedió otra beca para para hacer el MBA en MIT.
La formación en centros académicos de excelencia no sólo le inspiró y le trasmitió confianza, sino que le permitió forjar amistad con futuros emprendedores de éxito como Drew Houston, fundador de Dropbox, y Freddy Kerrest, fundador de Okta y autor de ‘Zero to IPO’. “Estar con ellos era contagiarse del ‘growth mindset’ de EEUU y pensar ‘si ellos pueden hacerlo por qué no voy a poder yo’?
Y vaya que pudo. Berenguer llegó a Nueva York “sin sueldo, sin familia, sin colchón económico” y en tres años se hizo millionario, vendiendo su primera startup, Pixable, una app para la gestión de fotos, a una empresa de Singapur y saliendo en las portadas de publicaciones famosas como Forbes y New York Times como emprendedor de éxito. Su mayor éxito sin embargo fue CoverWallet, la insurtech que fundó en 2015 y vendió en 2020 al gigante asegurador AON por “varios cientos de millones de dólares”.
El poder transformador de la tecnología
“El hilo conductor de todas mis empresas es usar la tecnología para hacer cosas que antes no podías; o bien creando mercados nuevos desde cero o bien entrando en sectores existentes para hacerlos mucho más eficientes”, afirma Berenguer. Ahora todas sus inversiones están centradas en aplicaciones de la IA, que será “10 o 20 veces más potente dentro de pocos años y lo transformará absolutamente todo”. Lo importante es “anticiparte a la ola de innovación y preguntarte ‘ésto va a ser relevante dentro de tres o cuatro años’? Porque para eso sí se encuentran inversores, para algo a 10 años o más no”.
Por eso en su fondo LifeX Ventures, Berenguer no invierte en empresas de desarrollo de fármacos (“tardan demasiado”) y sí invierte en startups dedicadas a democratizar el acceso a una sanidad de calidad con la ayuda de la IA, ya sea en el campo de la cirugía oncológica, las inmunoterapias o los fármacos anti-obesidad como los GLP-1, que “tienen potencial transformador en salud y longevidad, aunque aún haya cierta resistencia social a su uso”. Son más de 54 inversiones a día de hoy, un 70% en EEUU y un 30% en Europa. “Invertir no es idéntico al vértigo de fundar empresas,” reconoce, “pero se parece y como soy un omnívoro intelectual, invertir me permite aprender de forma contínua”. Berenger ha sido además uno de los primeros inversores en startups nacionales de relevancia, como Cabify o Flywire.
El arte de anticiparse
Para anticiparte, reconoce, Berenguer, “tienes que estar en la frontera del conocimiento y empujar un poco más allá, e imaginar qué puede pasar si combinas diferentes tecnologías punteras”. Es como ser un escritor de ciencia ficción: “si piensas que todo el mundo va a tener un móvil, puedes prever Instagram, Uber, Glovo, la ‘gig economy’.
¿Cómo ve el futuro este hombre al que no se le ha dado mal anticipar tendencias, a lo largo de su carrera empresarial?
Súbete al carro de la IA o quédate atrás. “La IA es tu mejor inversión de carrera. Esto es como recomendarle a alguien a finales de los 90 que se metiera en Internet”
La salud será el mayor campo de creación de valor con la IA. “No solo se trata de curar; la IA permitirá reinventar diagnósticos y transformar la gestión de hospitales y seguros médicos. La combinación de IA, visión computacional y robótica quirúrgica permitirá llevar la excelencia quirúrgica a cualquier lugar del mundo”.
Los datos, clave para el avance de la medicina personalizada. “Toda la información que hoy no se guarda, con IA se va a guardar, y eso permitirá ver causa-efecto y personalizar los tratamientos y la medicación. La privacidad de datos es una barrera, pero cuando le preguntas a la gente si está dispuesta a compartir sus datos si mejora su diagnóstico, la mayoría dice que sí.”
La ciberseguridad y los drones, nuevas armas de guerra. “Los conflictos del siglo XXI ya no serán con balas, sino con ataques informáticos y enjambres de drones autónomos. Un dron de combate es un Tesla volador: cámaras, radares e IA que toma decisiones en milisegundos.”
Avance en criptomonedas: el año de los stablecoins. “Antes de finales de año veremos un boom de las transferencias internacionales prácticamente gratuitas,” gracias a este tipo de criptomoneda diseñada para mantener un valor relativamente estable, frente a la volatilidad de los bitcoins
La unión entre Web3 e IA ya está ocurriendo. “Estamos invirtiendo en centros de datos sin GPUs propias, al estilo Airbnb.”
Excéptico con Europa. “Vamos por detrás en la mayor revolución tecnológica que existe ahora mismo, y mientras en EEUU sólo se habla de cómo liderar esa revolución, aquí en Europa hablamos de regularla. La gobernanza en esta parte del mundo es muy complicada e impide que se tomen decisiones rápidas”.
Al emprendimiento en España le falta ambición de crecimiento y una mentalidad más global. “Muchos emprendedores españoles se dedican a traer a Madrid algo que funciona en EEUU. Hay muy pocos que busquen competir con los mejores del mundo en su propio terreno”.
Si alguien le preguntara hoy, en base a su experiencia y su éxito profesional, cómo llegar a ser mejor ser humano, en un sentido holístico, ¿qué consejos le daría Iñaki Berenguer, que es además padre de tres niños pequeños y ha creado su propia fundación para devolver algo a la sociedad?
“Rodéate de gente íntegra, inteligente, con inquietudes. Gente que quiera hacer cosas fuera de lo normal. Porque eso se contagia. Dicen que somos la media de las diez personas con las que más tiempo pasamos, y es cierto. No se trata de tener un network muy grande, sino la red correcta”.
Su segundo consejo pasa por “entrar en empresas ambiciosas, en entornos de innovación”. La educación es otra forma de conectar con gente excelente para Berenguer. “Rodearte bien lo es todo”.
Iñaki Berenguer no sólo es un gamechanger de serie, que ha construido empresas disruptoras con ambición global en múltiples sectores, a base de inteligencia, tesón, un profundo conocimiento de la tecnología y “años y años sin un solo día de vacaciones”. Es, hoy por hoy, un auténtico referente para el ecosistema emprendedor español. Su entusiasmo es contagioso y su historia el vivo ejemplo del valor del esfuerzo, “el mejor regalo”, dice, que le dejó su padre.
