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El impactante giro de la IA: de herramienta de trabajo a terapeuta digital y coach de vida

Según el informe, la terapia y el acompañamiento son los principales usos. Esto sugiere que su disponibilidad 24/7 y su capacidad para ofrecer asesoramiento y retroalimentación anónimos y honestos son muy valorados.

 

Una nueva investigación de Harvard Business Review revela que las personas utilizan la IA generativa principalmente para terapia, compañerismo y organización de la vida en lugar de tareas técnicas como codificación o creación de contenido. Adobe Stock

Han pasado poco más de dos años desde que el lanzamiento de ChatGPT impulsó la revolución de la IA generativa. En ese corto tiempo, lo hemos visto evolucionar hasta convertirse en una herramienta empresarial potente y realmente útil. Pero las formas en que se usa podrían sorprender. Cuando lo vimos por primera vez, muchos probablemente asumimos que se usaría principalmente para realizar tareas creativas y técnicas en nuestro nombre, como codificar y escribir contenido.

Sin embargo, una encuesta reciente publicada en Harvard Business Review sugiere que no es así. En lugar de que nos hagan el trabajo, la mayoría de los usuarios buscan apoyo, organización e incluso amistad en ella.

Según el informe, la terapia y el acompañamiento son los principales usos. Esto sugiere que su disponibilidad 24/7 y su capacidad para ofrecer asesoramiento y retroalimentación anónimos y honestos son muy valorados.

Por otro lado, las tareas de marketing (como escribir blogs, crear publicaciones en redes sociales o textos publicitarios) aparecen mucho más abajo en la lista de usos populares.

¿A qué se debe esto? Analicemos lo que muestra la investigación y qué podría implicar sobre cómo seguiremos integrando la IA en nuestras vidas y nuestro trabajo.

Perspectivas e implicaciones

Una cosa que está clara es que, si bien la IA generativa es muy capaz de hacer el trabajo por nosotros mientras descansamos y nos relajamos, muchos prefieren usarla para generar ideas y realizar lluvias de ideas.

Esto podría deberse simplemente a la calidad del material generado por IA o incluso a un sesgo innato en los humanos que nos disuade de consumir contenido generado por robots. A menudo se observa que el estilo de escritura de la IA generativa puede resultar soso y formulista. Al preguntarles, la mayoría de las personas siguen diciendo que prefieren leer contenido creado por humanos. Aunque, en la práctica, no siempre podemos distinguir la diferencia.

Como afirma el autor del informe, Marc Zao-Sanders, “los 10 principales casos de uso de genAI en 2025 indican un cambio de aplicaciones técnicas a emocionales y, en particular, un crecimiento en áreas como la terapia, la productividad personal y el desarrollo personal”.

Después de la terapia y el acompañamiento, los usos más comunes de la IA generativa fueron «organizar mi vida», «encontrar un propósito» y «mejorar el aprendizaje».

El primer caso de uso técnico, “crear código”, ocupó el quinto lugar de la lista, seguido de “generar ideas”.

Esto trastoca algunas suposiciones aparentemente de sentido común sobre cómo la sociedad adoptaría la IA generativa, sugiriendo que se utilizará de formas más reflexivas e introspectivas de lo que se predijo inicialmente. En particular, que los usos terapéuticos encabecen la lista puede parecer sorprendente. Pero si consideramos que, a nivel mundial, hay escasez de profesionales capacitados para guiarnos en los desafíos de la salud mental, cobra más sentido. Los resultados de la encuesta están respaldados por la amplia gama de aplicaciones genAI emergentes diseñadas para uso terapéutico, como Wysa , Youper y Woebot.

La creciente necesidad de aprender y mejorar continuamente nuestras habilidades frente al avance tecnológico también podría explicar la popularidad del uso de la IA para mejorar nuestra educación y desarrollo profesional.

En general, estos conocimientos indican que la IA generativa se está adoptando en una gama más amplia de facetas de la vida cotidiana, en lugar de simplemente realizar trabajos que no queremos hacer nosotros mismos.

Pensamientos futuros

La trayectoria actual del uso de la IA sugiere un futuro en el que la IA será vista como un asistente colaborativo y de apoyo, en lugar de un reemplazo de las cualidades y habilidades humanas.

Esto tiene importantes implicaciones para su uso en las empresas. Adoptarlo para casos de uso que apoyen a los trabajadores humanos, en lugar de intentar reemplazarlos, probablemente resultará en empleados más felices, menos estresados ​​y, en última instancia, más productivos.

Ya hay cada vez más evidencia de que las empresas consideran la inversión en compañeros de salud mental y chatbots basados ​​en IA como una forma de mitigar la pérdida de productividad causada por el estrés y la ansiedad.

A medida que la IA generativa continúa evolucionando, podemos esperar que mejore en este tipo de tareas. El apoyo personalizado al bienestar, el aprendizaje guiado y las oportunidades educativas, la organización de flujos de trabajo y la generación de ideas son áreas en las que puede aportar un gran valor a muchas organizaciones, a la vez que elimina la preocupación de que esté aquí para reemplazarnos o hacernos innecesarios.

Comprender cómo se utiliza la IA hoy en día es esencial si queremos influir en su evolución futura. Si bien es fácil imaginar un mundo donde los robots se encarguen de todas nuestras tareas, la verdadera oportunidad reside en usar la IA para ayudarnos a trabajar de forma más inteligente, colaborar de forma más eficaz y promover formas de trabajo más saludables y equilibradas.

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