MADRID, 14 (EUROPA PRESS)
El ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, también ha abogado por simplificar la regulación bancaria, aunque ha detallado que se tiene que hacer sin comprometer la estabilidad del sistema.
Cuerpo ha detallado durante su intervención en un acto organizado por la patronal AEB la importancia de «reducir la carga administrativa de los bancos», algo que también debe ser extensible al resto del sistema productivo y de empresas.
En todo caso, el ministro ha indicado que la regulación prudencial y el marco de supervisión bancaria europea han sido «efectivos a la hora de asegurar la resiliencia» del sector bancario en los últimos años.
«Un sector bancario sano y competitivo es clave fundamental para canalizar el ahorro del sector privado a la economía real», ha dicho el ministro.
ESCRIVÁ TAMBIÉN DEFIENDE SIMPLIFICAR LA REGULACIÓN
En una línea muy similar se ha pronunciado el gobernador de Banco de España, José Luis Escrivá, que también ha participado en el acto de AEB, donde ha afirmado que existe un «consenso creciente» sobre el «nivel excesivo de complejidad regulatoria» en Europa, aunque ha dejado claro que esto no implica una desregularización.
El gobernador ha admitido que la excesiva complejidad «no solo dificulta la operativas de las entidades financieras, sino que también sobrecarga la función supervisora y podría fragmentar el mercado».
Por ello, comparte el objetivo que la Comisión Europea ha trasladado recientemente con el ‘paquete Ómnibus’ de evaluar, «desde una perspectiva holística», el marco normativo europeo y supervisor, y «racionalizarlo».
Sobre el ámbito europeo, el ministro Cuerpo ha indicado que Europa está ante su «última oportunidad» de recortar la brecha en materia de competitividad y productividad respecto a sus pares. Y ante ese reto, Cuerpo ha indicado que es necesario contar con un sector bancario que «ayude» y que sea solvente y competitivo.
A futuro, Europa tienen que «ampliar mercados» y reforzar sus cadenas de suministro al tiempo que sigue contribuyendo a una red internacional que se apoye en «valores compartidos». También debería eliminar barreras y aprovechar el potencial del mercado interior.