El consumo de electricidad no deja de crecer, y a la cabeza de esta demanda están tecnologías emergentes como la inteligencia artificial (IA). Las grandes tecnológicas como Amazon, Google y Oracle ya han movido ficha, y no hacia cualquier fuente de energía: están apostando por la nuclear, una opción limpia, constante y que puede operar sin interrupciones.
Esta nueva ola de interés en la energía nuclear, impulsada por la demanda global de electricidad y el compromiso con la sostenibilidad, también se refleja en el mercado de uranio, cuyo precio se ha disparado más de un 200% en los últimos cinco años, abriendo una interesante oportunidad para los inversores.
La energía nuclear en la era digital y la expansión de la demanda energética
El mundo digital exige cada vez más electricidad, y la seguridad en el suministro con bajas emisiones de carbono es una prioridad. La Agencia Internacional de Energía (AIE) estima que la demanda de electricidad se duplicará para 2050, impulsada por centros de datos, electrificación industrial y el auge de los vehículos eléctricos. Entre 2023 y 2035, se prevé que el consumo global de electricidad aumente en casi 1.000 teravatios hora (TWh) cada año, lo que equivale a añadir el consumo anual de un país como Japón cada año.
Este contexto está impulsando el desarrollo de la energía nuclear, especialmente en su forma más avanzada: los reactores modulares pequeños (SMR). Estos reactores ofrecen ventajas significativas sobre los modelos tradicionales, al ser más seguros, eficientes, económicos y mucho más rápidos de implementar.
Durante la COP28, una coalición de 22 países, incluidos Estados Unidos, Japón y Francia, se comprometió a triplicar la capacidad mundial de energía nuclear para 2050, lo que subraya la importancia del uranio como recurso clave para el futuro energético y anticipa una demanda que superará la oferta de este mineral en los próximos años.
La revolución de los reactores modulares pequeños en el horizonte energético
El desarrollo de los reactores modulares pequeños (SMR) ha introducido una disrupción en el sector nuclear. Estos reactores, diseñados para ser construidos en fábricas y transportados al lugar de instalación, reducen costes y tiempos en comparación con los reactores tradicionales. Pero lo más destacable es que los SMR permiten su ubicación en áreas estratégicas de alta demanda energética, una ventaja sin precedentes para infraestructuras como los centros de datos, que operan las 24 horas, todos los días del año.
Según Goldman Sachs, la demanda de electricidad para centros de datos en Estados Unidos se expandirá a un ritmo anual del 15% hasta 2030, alcanzando el 8% de la demanda nacional de electricidad. Esta previsión está empujando a gigantes tecnológicos como Oracle y Google a asegurar energía para sus centros de datos mediante acuerdos con desarrolladores de SMR. Amazon, por su parte, ha dado un paso más al invertir directamente en la firma X-Energy para producir 5 GW de energía nuclear hacia 2039.
A pesar de que estos reactores aún no están operativos en Estados Unidos, el Departamento de Energía ha destinado 900 millones de dólares para impulsar su desarrollo, con la intención de acelerar la integración de los SMR en la red eléctrica. Otros países, como China y Rusia, ya han avanzado en esta tecnología, dejando claro que los SMR representan una apuesta global por un suministro energético eficiente, seguro y alineado con los objetivos de sostenibilidad.
Opciones de inversión en el resurgimiento nuclear: Uranio y reactores SMR
Cuando se trata de invertir en la “nueva ola nuclear”, existen dos alternativas: entrar en el mercado del uranio o en el desarrollo de reactores modulares pequeños (SMR).
Uranio, un mercado de alta demanda y oferta limitada
El uranio es la piedra angular de la energía nuclear. Los precios han escalado un 223% desde 2019, reflejando una demanda cada vez mayor en un mercado con oferta restringida. Pero ¿a qué se debe este impulso? Para empezar, los recortes de producción tras el accidente de Fukushima en 2011 provocaron una notable escasez en la oferta de uranio, y aunque el mercado ha tratado de recuperarse, la producción sigue por debajo de los niveles necesarios para cubrir la demanda proyectada en los próximos años. Esto, sumado a los conflictos en países productores clave como Kazajistán y la inestabilidad en Níger, ha intensificado las tensiones en el suministro mundial.
Para los inversores que buscan exposición directa al uranio existen varios productos como el fondo Sprott Physical Uranium Trust, que permite beneficiarse de la apreciación del precio del uranio son los riesgos específicos de la minería. Otra alternativa es el ETF Sprott Uranium Miners, que invierte en una amplia gama de mineras de uranio y ofrece exposición a nombres importantes como Kazatomprom y Cameco, las dos mayores productoras de uranio del mundo.
También existe el Global X Uranium ETF, que replica el índice Uranium Global Solactive, con empresas como NexGen Energy y Uranium Participation. Para quienes buscan exposición a compañías más consolidadas en el sector nuclear, el VanEck Vectors Uranium Nuclear Energy ETF podría ser una opción interesante, ya que incluye a grandes empresas de Estados Unidos y Japón.
Inversión en SMR: tecnología avanzada y combustible especializado
El desarrollo de los reactores modulares pequeños (SMR) se perfila como una inversión de alto potencial en la nueva era nuclear. En el ámbito bursátil, dos pioneros en esta tecnología cotizan en bolsa: NuScale y Oklo. NuScale, con la ventaja de contar con la aprobación de la Comisión Reguladora Nuclear de Estados Unidos, mantiene una sólida cartera de proyectos, aunque ha experimentado ajustes en costos y cronogramas debido a la complejidad de su tecnología. Oklo, todavía en fase de desarrollo, planea ofrecer contratos de venta de energía a largo plazo para asegurar ingresos estables y capturar beneficios a medida que madura el sector.
Una alternativa de menor riesgo es Centrus Energy, la única empresa cotizada con licencia para producir uranio poco enriquecido de alto ensayo (HALEU), indispensable para los SMR. Además, Centrus suministra uranio enriquecido a empresas de servicios públicos a nivel global, manteniendo un flujo de caja sólido y diversificado. Para los inversores, Centrus ofrece exposición tanto al crecimiento de los SMR como al mercado de combustible nuclear, posicionándose como una opción integral en el auge de la nueva generación nuclear.