El Hygge es un concepto extendido por su uso en países nórdicos que responde a una particular forma de entender y de disfrutar de la vida basada en los planes sencillos, confortables y relajados, ya sea en soledad o en buena compañía. Quizá por eso, aplicando esta filosofía, en la capital danesa están convencidos de que su calidad de vida es innegable; tanto que su la región de Greater Copenhagen ha decidido hacerse cargo de los costes de mudanza y gastos de todo aquel que se mude a la región y no esté satisfecho con la experiencia.
Esta medida es la consecuencia de su programa Life Quality Insurance, mediante el que los visitantes tienen que registrarse a través de su web y haberse mudado a esta región como condiciones base. Una vez hecho esto, si no están contentos con la mejora de su calidad de vida, se procede a la devolución de costes en cuestión.
“Estamos tan seguros de que la gente se enamorará de la vida en la Región del Gran Copenhague que estamos dispuestos a predicar con el ejemplo. Si te mudas aquí y descubres que, contra todo pronóstico, no es para ti, te ayudaremos a volver a casa”, así lo ha explicado el portavoz de dicha región, Asbjørn Overgaard.
Obviamente, esta política tiene sus riesgos así que, ¿qué los hace tan confiados? Lo primero, es que la región del Gran Copenhague se mantiene constantemente en el top de los ránkings de ciudades más habitables del mundo. Es más, la ciudad de Copenhague quedó en segundo lugar (justo detrás de Viena) en el Índice de Habitabilidad Global que publicó The Economist Intelligence, sacando puntuaciones de 100 en materia de educación, infraestructura y estabilidad, seguidas de otras tan relevantes como atención médica, cultura y medio ambiente.
En segundo lugar, Dinamarca ha vuelto a ser elegida -junto con Suecia- como uno de los diez mejores países para vivir, esta vez en la encuesta Expat Insider de 2024 de US News, concretamente para los extranjeros de este país.
Otro gran punto a favor de la región del Gran Copenhague es que es uno de los líderes mundiales que despuntan en energía renovable, con una economía próspera como resultado de que las empresas han establecido la región como su sede. Esto también garantiza un mayor ahorro y una calidad de vida más sostenible, fruto de una transición ecológica altamente eficiente como consecuencia, en parte, de sus limitados recursos naturales.
De hecho, Dinamarca fue el primer país del mundo en reducir sus emisiones de carbono a la mitad, muy por encima del resto de países europeos, además de reducir casi la mitad de la energía del país proviene de la energía eólica. También esta región cuenta con excelentes comunicaciones internas en la ciudad, hacia la parte sur nórdica y el resto del continente europeo, junto con los países vecinos de Suecia, Noruega y Finlandia -como ya es sabido-.
Eso sí, los interesados en ser candidatos o candidatas elegibles, tienen que darse prisa: hay que aplicar al programa antes del fin de noviembre.