MADRID, 22 (EUROPA PRESS)
La «contención» de los riesgos a corto plazo para la estabilidad financiera mundial en un contexto de desaceleración de la inflación invita a pensar en un «aterrizaje suave» a nivel mundial que está alimentando el optimismo en los mercados financieros, según el Fondo Monetario Internacional (FMI) para el que existe una «creciente desconexión» entre la elevada incertidumbre económica y la baja volatilidad financiera.
«Existe una especie de cuña entre la volatilidad implícita del mercado financiero y la evaluación de la incertidumbre política o económica», ha señalado el consejero financiero del FMI, Tobias Adrian, en la presentación del ‘Informe de Estabilidad Financiera Global’.
En este sentido, la institución con sede en Washington destaca que las condiciones financieras se han mantenido acomodaticias y la volatilidad en los mercados financieros se ha mantenido baja, añadiendo que las condiciones financieras acomodaticias «facilitan la acumulación de vulnerabilidades».
De tal modo, las valoraciones de los activos parecen elevadas, la deuda ha aumentado a nivel mundial y el uso del apalancamiento entre los intermediarios financieros no bancarios ha aumentado al tiempo que continúan existiendo fragilidades en los sectores inmobiliario corporativo y comercial.
Estos desequilibrios, avisa el informe del FMI, podrían empeorar los riesgos a la baja en el futuro al amplificar los shocks adversos, que se han vuelto más probables debido a la «creciente desconexión entre la elevada incertidumbre económica y la baja volatilidad financiera».
«Esta desconexión hace que los shocks sean más probables», porque una alta tensión geopolítica podría desencadenar ventas repentinas en los mercados financieros y hacer que la volatilidad repunte, obligando a algunas entidades financieras pueden verse forzadas a vender activos o desapalancarse en sus balances para cumplir con los requerimientos de margen o satisfacer los límites de riesgo
«Esta tensión nos preocupa porque da lugar a la posibilidad de un reajuste brusco de las condiciones financieras», ha advertido Tobias Adrian, añadiendo que el pronóstico de base para el FMI «es el de un aterrizaje suave a nivel mundial».
Por este motivo, el FMI subraya la necesidad de que las autoridades «deben estar atentas», puesto que la gran desconexión entre incertidumbre, riesgo geopolítico y volatilidad de los mercados financieros, hace probable que los aumentos repentinos de la volatilidad sean más frecuentes.