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Por qué Apple quiere alejarse de su habitual estrategia de lanzamientos anuales

Un hombre visto usando su teléfono junto al iPhone 16 en la tienda de Apple en Mumbai. (Foto de Ashish Vaishnav/SOPA Images/LightRocket vía Getty Images). SOPA IMAGES/LIGHTROCKET VÍA GETTY IMAGES

Apple va a cambiar su enfoque de lanzamientos de productos. Durante años, la compañía ha seguido una estrategia rígida de actualizaciones anuales para sus dispositivos más importantes, como iPhones, iPads y Macs, presentando sus novedades de software en junio y lanzando los productos en otoño. Sin embargo, esta dinámica está comenzando a variar. El gigante tecnológico busca ahora una mayor flexibilidad, lo que podría resultar en lanzamientos más frecuentes y menos retrasos.

Ventajas y desventajas del ciclo anual

El ciclo de actualizaciones anuales ha sido durante mucho tiempo la piedra angular de la estrategia de Apple. Este enfoque permitía a la compañía tener un objetivo claro para todos sus empleados y facilitaba a los analistas e inversores predecir cuándo llegaría el repunte de ventas, especialmente durante el crucial trimestre navideño. Además, concentrar los lanzamientos en otoño garantizaba la atención de los medios, justo cuando volvían de las vacaciones.

Sin embargo, este enfoque tiene sus limitaciones. Apple ahora gestiona una gama de productos mucho más amplia que hace unos años, que incluye varios modelos de iPhones, iPads, Macs y dispositivos como los AirPods. Actualizar todos estos productos anualmente ha dejado de ser práctico. A su vez, algunos productos, como el Apple Watch Ultra o el iPhone SE, no requieren mejoras tan frecuentes, lo que hace innecesario seguir un calendario estricto de lanzamientos.

Señales del cambio

En los últimos años, Apple ha comenzado a desviarse de su calendario tradicional. En 2023, por ejemplo, lanzó nuevos iPads en mayo y presentó un renovado HomePod en enero. En la Conferencia Mundial de Desarrolladores (WWDC) de ese mismo año, la compañía reveló un MacBook Air de 15 pulgadas en junio, un mes poco habitual para lanzamientos de hardware.

Este cambio es más que una simple reorganización de fechas. Apple se enfrenta a la complejidad de manejar múltiples sistemas operativos (iOS, macOS, watchOS, entre otros), lo que dificulta coordinar las actualizaciones de todos sus productos al mismo tiempo. Además, su equipo de ingeniería debe trabajar simultáneamente en distintos dispositivos, desde los auriculares hasta la acústica de los Macs, lo que añade presión.

Los retos del enfoque anual

El enfoque tradicional de Apple ha empezado a mostrar grietas. En los últimos años, la compañía ha tenido que retrasar el lanzamiento de algunas funciones clave de software, causando situaciones incómodas. Por ejemplo, algunas características anunciadas en junio no estuvieron disponibles hasta varios meses después. Recientemente, el iPadOS 18 tuvo problemas técnicos que inhabilitaron algunos modelos de iPad Pro, obligando a la empresa a retirar temporalmente el sistema operativo.

Un futuro más flexible

A medida que Apple avanza hacia un calendario de lanzamientos más flexible, también se vuelve más honesta con su público. Durante el lanzamiento del iPhone 16 en septiembre de 2024, la compañía destacó que algunas de las funciones más avanzadas, basadas en Inteligencia Artificial, llegarán en actualizaciones escalonadas a lo largo de varios meses. Este cambio permite a Apple evitar la presión de tener que lanzar productos «incompletos» y, al mismo tiempo, puede generar expectativas más realistas.

En términos de hardware, el cambio también es evidente. Este año, en lugar de lanzar un nuevo Apple Watch Ultra, la compañía simplemente introdujo una versión en color negro del Ultra 2, y no tocó el Apple Watch SE. Este enfoque sugiere que Apple está adoptando un ciclo de renovación de dos años para algunos productos, reservando mayores innovaciones para momentos clave.

Un nuevo camino para Apple

El cambio hacia un enfoque más escalonado podría asustar a algunos inversores, acostumbrados a los picos de ventas durante el trimestre navideño. Sin embargo, a largo plazo, esto podría permitir a Apple ser más innovadora, liberar a sus equipos de desarrollo de plazos estrictos y generar ingresos de manera más sostenida durante todo el año. Con esta nueva estrategia, Apple apunta a un futuro en el que la calidad y la innovación prevalezcan sobre la cadencia fija de lanzamientos.