Ventajas.
1. Gente interesante.
Según la Fundación Case, las entidades sin ánimo de lucro a menudo tienen que elegir entre los mejores y más brillantes candidatos y ser exigentes con quienes optan a los empleos.
2. Oportunidades de crecimiento.
Un empleado de una ONG puede ver que se le asignan varios proyectos a la vez. “Esto puede conducir a un desarrollo profesional más rápido y unas responsabilidades más variadas de trabajo para aquellos que buscan salir adelante rápidamente”, dice la Fundación Case.
3. Es un trabajo significativo.
Trabajar en una ONG te proporciona el tipo de trabajo que de otro modo sólo podrías hacer en tu tiempo libre y de forma no remunerada. Esto puede ser especialmente atractivo para aquellos que están en busca de un trabajo más acorde con sus aficiones o su propósito de vida.
4. Los diferentes tipos de puestos de trabajo
Hay muchísimos tipos de perfiles profesionales dentro de una ONG: médicos, enfermeras, periodistas, profesionales del marketing…
Inconvenientes.
1. Salario.
Algunas organizaciones no lucrativas pueden pagar un salario similar al del sector de ánimo de lucro, pero no es una regla general. Otros beneficios pueden compensar salarios más bajos.
2. Horas trabajadas.
Para las organizaciones no lucrativas el objetivo es tener un efecto positivo en el mundo. Y se espera que los miembros del personal compartan ese punto de vista, cosa que a veces puede traducirse en más horas. Si eres un apasionado de tu trabajo en la organización, más horas trabajadas no serán un problema.
3. Ambiente de trabajo frustrante.
Las ONG pueden no tener recursos para tener la última tecnología. Además hacer ciertas cosas puede requerir recorrer un laberinto infinito de burocracia.
4. Ser contratado es complicado.
Que escojan a los candidatos más brillantes puede hacer que sea más difícil obtener un trabajo en una ONG si no te tomas en serio el proceso.