Nativa de Vermont, Ilona Maher (1996) no comenzó a jugar al rugby hasta que tenía 17 años. Jugó al rugby en la Universidad de Quinnipiac y ayudó a su equipo a ganar tres campeonatos de la Asociación Nacional de Rugby Intercolegial, y jugó su primer partido para el equipo de rugby de siete de la Copa del Mundo de EE. UU. en 2018 y compitió en los Juegos Olímpicos de Tokio en 2021, donde el equipo terminó sexto. Convertida en una de las jugadoras más grandes de un equipo de rugby, fue entrevistadas por Forbes USA el año pasado: «Simplemente corro entre la gente y trato de hacer algo». Y se le da bien, porque ha marcado en los tres partidos del equipo de rugby hasta ahora en los Juegos Olímpicos de París [el equipo ha jugado tres partidos hasta ahora contra Brasil, Japón y Francia. Estados Unidos venció a Brasil (24-5) y Japón (36-7), pero cayó 31 a 14 contra Francia. Las estadounidenses avanzaron a los cuartos de final, donde jugarán contra Gran Bretaña el lunes].
Además de serlo en su profesión, Maher, de 27 años, es toda una estrella de Tik Tok. Hace tres años al hacer un vlogueo en los Juegos Olímpicos de Tokio, en un esfuerzo por dar a conocer el deporte del rugby siete femenino, encontró hordas de fanáticos que se enamoraron de su confianza en sí misma, su honestidad y su comedia. Hoy, acumula más de 1,6 millones de seguidores en la red social (además de otros 1,4 millones en Instagram) y ha publicado docenas de videos desde que aterrizó en París para los juegos de verano que han sido vistos entre 600.000 y 14 millones de veces cada uno.
Hasta ahora, sus videos más populares la han visto comparar la Villa Olímpica con la «villa» del popular programa de citas Love Island, conocer al comentarista Snoop Dog y pedirle al ex jugador de la NFL favorito de los fanáticos Jason Kelce que declare su lealtad al deporte del rugby femenino como lo hizo el rapero Flavor Flav para el equipo femenino de waterpolo de EE. UU.
Pero no sólo difunde información sobre el rugby femenino, Maher utilizar su plataforma para defender la positividad corporal, compartiendo sus propias historias de vergüenza por su físico ‘masculino’ y musculoso y, en un clip publicado durante la ceremonia de apertura del viernes, alentando a los fanáticos a «echar un vistazo a todos los diferentes tipos de cuerpo en exhibición».
Desde que comenzó su fanatismo en TikTok, Maher ha conseguido acuerdos de marca con Secret y L’Oréal, ha aparecido en podcasts populares de otros tiktokers, como The Comment Section y Real Pod, y ha lanzado una línea de cuidado de la piel llamada Medalist con la ex nadadora universitaria Ann Ragan Kearns.
Este fin de semana, le dijo a The Guardian que ha usado TikTok para construir su marca personal y espera que la ayude a «hacer del deporte una carrera», algo que reconoció que muchas atletas femeninas no pueden hacer.
Maher no es la única atleta olímpica que ha tenido éxito en TikTok. La nadadora artística estadounidense Daniella Ramírez, conocida por sus videos detallados sobre las extensas rutinas capilares necesarias para su deporte, ha acumulado más de medio millón de seguidores y la corredora de distancia Nikki Hiltz (114.000 seguidores) se ha hecho famosa por compartir su experiencia como atleta transgénero y no binaria. Suni Lee (1,8 millones de seguidores) hizo un videoclip famoso sobre su experiencia en los Juegos Olímpicos de Tokio, donde ganó la medalla de oro en gimnasia artística, y está haciendo lo mismo este año.
