Pese a las restricciones (y las polémicas), el alquiler turístico es un importante motor económico en España, empleando a una proporción significativa de la población y generando ingresos sustanciales tanto para los propietarios como para las comunidades locales. Según afirma GuestReady, empresa de gestión de apartamentos turísticos, el alquiler turístico supone unos 25.000 puestos de trabajo directos y unos ingresos de 2.089 millones de euros para los propietarios.
Además, y siempre según los cálculos de GuestReady, este sector representa un tercio de la capacidad alojativa del país, acogiendo a 9,12 millones de turistas extranjeros el pasado año 2023. En este sentido, las estadísticas de Viviendas de Uso Turístico (VUT) suponen un impacto relativo en los precios de alquiler en ciudades como Madrid, donde solo representan el 0,92% del total de viviendas, frente al 6,34% que están vacías.
Incertidumbres para el sector
Las recientes regulaciones han dejado al sector de los alquileres turísticos en una situación de espera y análisis. Cambios como la suspensión de nuevas licencias turísticas en Madrid y regulaciones específicas en Barcelona han derivado en una repentina parálisis del entorno actual, que afecta también a la planificación y el potencial crecimiento del mercado de inmuebles disponibles para un alquiler turístico a medio plazo.
Desde las empresas gestoras hasta los propietarios particulares, los actores de este sector permanecen expectantes ante los cambios que se esperan los próximos meses.
En cuanto a las proyecciones para este año, GuestReady anticipa un periodo de estancamiento mientras se espera una mayor claridad y apoyo por parte de las instituciones. Según afirma Lorenzo Ritella, country manager de GuestReady, “a pesar de las restricciones en crecimiento, desde GuestReady seguimos comprometidos con maximizar la rentabilidad y mantener la calidad en nuestros servicios, asegurando así experiencias inolvidables tanto para los huéspedes como para los propietarios”.