Hermès ha cerrado el primer trimestre del año con una cifra de ventas de 3.805 millones de euros, lo que equivale a un incremento del 12,6% en comparación con el mismo periodo del año anterior.
El presidente de Hermès, Axel Dumas, ha achacado este sólido desempeño a la «lealtad» de sus clientes en todo el mundo y a la fortaleza de su cartera de productos ante un entorno «más complejo». Además, a finales de marzo, las fluctuaciones monetarias impactaron negativamente en 148 millones de euros sobre los ingresos.
En este sentido, por mercados, las ventas en Europa han crecido un 13,9% interanual, llegando a los 757 millones de euros. Mientras, en América, el incremento de las ventas del 10,3% ha elevado su cifra de negocio a los 614 millones de euros.
Por su parte, en el mercado asiático, de donde procede más de la mitad de su facturación, Hermès ha experimentado una mejora de sus ingresos del 9,2%, hasta los 2.277 millones de euros. Otras regiones aportaron 158 millones de euros.
Por segmentos, el área de marroquinería facturó 1.628 millones de euros y la de prêt-a-porter y accesorios, 1.061 millones. Esto es un 15,5% y un 11,7% más, respectivamente. La división de textiles brindó 242 millones de euros, un 3,4% más, la de perfumes 130 millones de euros, un 3% más, y la de relojería 166 millones de euros, un 0,1% más. Otros sectores y productos sumaron 579 millones de euros.
A medio plazo, a pesar de las incertidumbres económicas, geopolíticas y monetarias, el grupo ha confirmado un «ambicioso objetivo» de crecimiento de los ingresos a tipos de cambio constantes.