El fundador y presidente del Grupo Iberostar, Miguel Fluxá, ha recibido este lunes de manos del Rey Felipe VI la Encomienda de la Real Orden de Isabel la Católica en un acto privado que se ha celebrado en el Palacio de la Almudaina de Mallorca.
Durante el acto, Fluxa ha asegurado que entiende esta condecoración «como un reconocimiento al turismo», actividad que ha ocupado su larga vida profesional, y ha agradecido la atención que la Corona ha prestado «a esta actividad, clave para la economía española».
El empresario mallorquín, que ha dedicado esta distinción a su familia, ha destacado que la recibe pensando en todos los que han contribuido y contribuyen al sector. «A nuestros compañeros de camino en el sector les agradezco el esfuerzo compartido para crear la marca España y llevarla fuera de nuestras fronteras, construyendo entre todos un turismo de calidad», seguró durante su discurso.
También tuvo unas palabras para las comunidades en las que desarrolla su trabajo «y, sobre todo, a los territorios americanos; agradezco su siempre cálida acogida, que ha permitido nuestra internacionalización a la par que su desarrollo».
Sabina Fluxá, vicepresidenta y CEO de Grupo Iberostar y Gloria Fluxá, vicepresidenta y responsable de sostenibilidad de la compañia, que han acompañado a su padre en el acto, han destacado que esta condecoración supone «un gran impulso para seguir trabajando con ilusión en el modelo de turismo responsable y positivo que es seña de identidad de la compañía».
La Orden de Isabel la Católica fue instituida en 1815 con la denominación de Real Orden Americana de Isabel la Católica y tiene por objeto «premiar aquellos comportamientos extraordinarios de carácter civil, realizados por personas españolas y extranjeras, que redunden en beneficio de la Nación o que contribuyan, de modo relevante, a favorecer las relaciones de amistad y cooperación de la Nación Española con el resto de la Comunidad Internacional».