La conocida como «la diosa de Montreal», Nadia Comaneci (1961, Rumanía), aterriza hoy en la capital como miembro de la Academia de los premios Laureus. Considerada como una de las mejores gimnastas del mundo, y con un patrimonio estimado en 10 millones de dólares, forma parte del jurado de la 25ª edición de los conocidos como los Oscars del deporte, por primera vez celebrados en Madrid. La ceremonia tiene lugar hoy en la Galería de Cristal del Palacio Cibeles, en donde según dijo Ayuso en la presentación de las nominaciones el pasado 26 de febrero: “La comunidad y la ciudad de Madrid seremos testigo convirtiéndonos una vez más en la capital mundial del deporte”.
Estos premios son otorgados de la mano de los más altos cargos deportistas de todos los tiempos a las nuevas promesas dentro del terreno actual, tanto de manera individual como colectiva, y entre el jurado no podía faltar Comaneci. La exgimnasta es la dueña de la primera marca perfecta (10) en una competición olímpica de gimnasia artística en los Juegos Olímpicos de Monteral en 1976. Con su estilo preciso, elegante e impecable, a la temprana edad de 15 años dejó atónito a todo el mundo con sus capacidades sobre la barra de equilibrio y las barras asimétricas, lo que solamente sirvió como pistoletazo de salida para convertirse en una de las gimnastas más destacadas que ha acumulado un patrimonio ejemplar por sus éxitos dentro y detrás del juego.
Su éxito ha sido labrado por todo tipo de metales preciosos, en su mayoría en forma de oro, en su papel de deportista, y en el caso de su patrimonio, en forma de dólares, como exitosa empresaria de un exitoso centro de gimnasia y codueña de una de las compañías de producción de eventos de gimnasia principales de EE.UU. La exgimnasta rumana ha tenido que luchar con su ambición por una vida entera dedicada al deporte, a través de esfuerzo, compromiso e incluso a partir de huir del régimen comunista que oprimió a todo su país y que actuaba a su vez como barrera de su talento. De la mano de Forbes Women, hoy otorgamos el recuerdo al talento y dedicación de Nadia Comaneci en el mundo del deporte.
La diosa de Montreal
Gracias a su destreza impecable sobre las barras olímpicas, Nadia fue una de las impulsoras de la difusión popular de este deporte a lo largo de todo el mundo. Su influencia nació a los cinco años, en la práctica de gimnasia en su ciudad natal, en una Moldavia comunista a mediados de la segunda mitad del siglo XX. Su gran destreza asombró al famoso entrenador de gimnasia Bela Karolyi -autor del sistema de entrenamiento centralizado rumano para gimnasia-, quien se convirtió en su maestro durante toda su trayectoria.
Poco después de su fichaje, ya era la pieza de resistencia y talento en el equipo de gimnasia rumano. Tras varios logros en campeonatos nacionales y europeos, la actuación de su vida llegó en 1976 en los Juegos Olímpicos de Montreal, en donde por primera vez en la historia fue calificada con un 10 la calificación perfecta por su rutina impecable de 30 segundos sobre las barras asimétricas. Nombrada como Personalidad Deportiva del Año de la BBC en el Extranjero en 1976, cuya foto apareció de portada en la revista Time, Comaneci ganó otras seis calificaciones de 10 a lo largo de su carrera. Su éxito estuvo acompañado por su además récord de 24 medallas -16 de ellas de oro-, en los Juegos Olímpicos, Campeonatos del Mundo y Campeonatos de Europa.
Tras su gira mundial de ‘Nadia 1981’, estuvo bajo supervisión constante de las autoridades y le fue prohibido viajar a países occidentales debido a la deserción de su entrenador al huir a Estados Unidos. Se retiró de la barras en el mismo 1981, estudió Educación Física en la Universidad de Rumanía y planeó seguir los mismos pasos que su míster. En 1989 unas semanas antes de la Revolución de Rumanía, cruzó la frontera hasta Hungría para escapar del comunismo y llegar a EE.UU, para vivir del deporte con libertad de decisión y expresión. No volvió a su país de nacimiento hasta su boda con el exgimnasta Bart Connor en 1996, cuya recepción tuvo lugar en el antiguo palacio presidencial de Bucarest.
Junto a su marido dirige un centro de gimnasia muy exitoso en Estados Unidos y desde 1998 son dueños de la compañía de producción que produce los principales eventos de gimnasia emitidos en los canales deportivos del país, como ESPN y Fox Sports, y en ocasiones del mundo. Gracias a sus logros como gimnasta y sus nuevos ámbitos empresariales dentro del deporte, Comaneci registra una trayectoria impecable dentro de este mundo, que se traduce en un patrimonio de 10 millones de dólares.
Es considerada la ganadora más joven y única persona que ha recibido dos veces, en 1984 y 2004, la Orden Olímpica, el máximo galardón otorgado por el Comité Olímpico Internacional. También ha sido incluida en el Salón de la Fama de la Gimnasia Internacional, además de ser Embajadora Deportiva de Rumania, Presidenta de Honor de la Federación Rumana de Gimnasia, Presidenta de Honor del Comité Olímpico Rumano y miembro de la Fundación de la Federación Internacional de Gimnasia. En sus nuevas facetas de entrenadora, comentarista y escritora (Cartas a una joven gimnasta, 2004), refleja su influencia en sus constantes éxitos por su gran labor dentro del deporte, donde su dedicación y compromiso no tiene fin, y que continúa hoy con los premios Laureus en Madrid.
Los Oscars del deporte, en Madrid
Con su ceremonía hoy mismo en Madrid, España se ha convertido en el país en el que más ciudades ha celebrado los premios Laureus del Deporte Mundial, siendo Mónaco el único que le supera por total de entregas.
Gracias al generoso patrocinio de la Comunidad y Ayuntamiento de Madrid, que suman 500.000 euros en total, según elDiario, la capital es la última apuesta de este gran espectáculo del deporte, donde se hablará de novedades como la llegada de Formula 1 en 2026 a Ifema y del partido de la Liga de Fútbol Americano (NFL) que tendrá lugar en el Santiago Bernabéu el próximo 2025.
En este homenaje anual al deporte, junto a Nadia Comaneci se encuentran otras grandes figuras del deporte entre el jurado como los exfutbolistas Raúl González o Luis Figo y la extenista Martina Navratilova, además de numerosos invitados de élite como el exatleta jamaicano Usain Bolt -ocho veces campeón olímpico-, el tenista griego Stefanos Tsitsipas o el campeón del mundo del peso pluma de la MMA Ilia Topuria.
