Como hemos remarcado en muchas ocasiones, los emprendedores se enfrentan a muchos desafíos a lo largo del día. Esto crea mucha desconfianza en uno mismo, muchos momentos de duda. En estos momentos, es necesario empezar a hacerse las preguntas adecuadas. Para cuestionarse a uno mismo es necesario hacer un gran ejercicio de introspección para darse cuenta de las cosas que están fallando en nuestra vida sin que seamos conscientes de ello. Es algo bastante agotador, y al final del camino, incluso cuando sepas qué está fallando, puede que no sepas cómo debes arreglarlo. Incluso los grandes empresarios como Bill Gates han cuestionado sus pensamientos en alguna ocasión
Lo importante es que cuestionándote a ti mismo obtendrás grandes beneficios. Descubrirás que existen muchas partes de tu personalidad que no conoces y muchas soluciones que has estado buscando durante mucho tiempo. Puedes empezar por cuestionar tus propias habilidades. Dependiendo de tu puesto de trabajo, es posible que cuentes con ciertas habilidades o con otras. Pero dependiendo de la empresa en la que trabajes, o hayas trabajado, puede que utilices un método u otro para llegar a un mismo fin. Lo importante es estar siempre abierto a la reinvención, a no conformarse nunca con nada. Para ello es necesario hacerse preguntas que pueden resultar incómodas.
Cuando estas preguntas tienen respuestas negativas, es importante saber que no significa que esto sea algo negativo. Es muy importante saber reconocer cuáles son nuestras debilidades y cuáles son nuestras fortalezas. Incluso cuando pensamos que es imposible que podamos realizar una tarea en particular, mediante la introspección podemos descubrir caminos que nos lleven a la conclusión de que con ayuda seremos más que capaces de hacerlo. Todo es cuestión de perspectiva, de utilizar la correcta concretamente.
Lo primero es preguntarte cuáles son todas esas preguntas que no te estás haciendo, aquellas que te van a llevar más lejos. Los emprendedores son personas que ven las oportunidades donde nadie, o donde muy poca gente las puede ver. Esto no quiere decir que puedan estar en todos los lugares o que sepan hacerlo todo. Con esto en la mente, los emprendedores encontrarán la forma de llevar su meta un buen puerto al final del día. Esto es lo que les diferencia del resto de las personas.