Leonardo Da Vinci fue uno de los grandes genios del Renacimiento revolucionando el mundo del arte y de la ciencia. En la actualidad, la Inteligencia Artificial (IA) pretende revolucionar la tecnología emulando la inteligencia humana a través de algoritmos y el procesamiento de datos. Dos mundos – el del ser humano y el de la tecnología – que se dieron la mano el pasado 15 de abril, fecha del nacimiento de Da Vinci y en el que se celebra el ‘Día del Made in Italy’, en la Embajada italiana de Madrid en un evento que contó con el respaldo del Ministerio de Asuntos Exteriores y de la Cooperación Internacional de Italia, de la Oficina en Madrid de la Agencia Italiana para el Comercio Exterior (ICE), y la colaboración de la revista Forbes.
“Hemos querido celebrar este día del Made in Italy de una manera original abordando un tema de interés social y también legal, en el que está trabajando la presidencia italiana: el tema de la Inteligencia Artificial”, decía Giuseppe Maria Buccino Grimaldi, embajador de Italia en España y Andorra, en la presentación de este evento, que también fue retransmitido en streaming. Para lograrlo, la Embajada de Italia y la Oficina ICE en Madrid, con la colaboración de Forbes, plantearon un reto en el que seis expertos de diferentes sectores representativos de la excelencia productiva italiana (industrias culturales y creativas, ciencia, diseño, agroindustria, moda, turismo) tenían que responder a las mismas preguntas cuestionadas a un ordenador dotado de dos sistemas de Inteligencia Artificial: Gemini y Chat GPT. El objetivo era tratar de demostrar los puntos diferentes de las respuestas y la superioridad de la creatividad humana en las mismas.
Este original debate “no es una competición entre diferentes formas de inteligencias, sino un ejercicio de complementariedad”, afirmaba Giovanni Bifulco, director de la Oficina ICE, para quien este evento fue una “una importante oportunidad de analizar la calidad italiana en muchos ámbitos”. Unos sectores que conforman la marca Made in Italy, y todo un ejemplo a seguir para Andrés Rodríguez, presidente de SpainMedia y director y editor de Forbes, que reconocía cómo Italia le ha ayudado en la construcción de su empresa.
Para ir desgranando en este desafío todo lo que hay detrás de la marca Made in Italy, la periodista Laila Jiménez fue la encargada de realizar una serie de preguntas tanto a los ordenadores con IA como a los invitados al reto: el director del Círculo de Bellas Artes Valerio Rocco Lozano, la investigadora del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) Nanda Rea, el chef Andrea Tumbarello, la arquitecta Beatriz Silveira, la modelo y actriz Inés Sastre y el periodista y escritor Carlos Pascual.
Valerio Rocco Lozano fue el primero en participar en este reto analizando si Italia es una potencia mundial en el ámbito de las industrias culturales y creativas. A su juicio, este país mediterráneo es “mucho más”. “La cultura es un ambiente que se palpa por el ser humano”, explicaba. Según Rocco Lozano, la IA podrá conocer la cultura italiana, pero “nunca podrá amarla como hacemos los italianos”. Precisamente, al preguntar por lo mismo a Gemini, el modelo de IA de Google hizo todo un repaso por el “rico patrimonio cultural” del país, centrándose en el arte, la moda, la música, la ópera, el cine, la literatura y otra serie de sectores creativos italianos.
Sobre cómo la IA puede ayudar a promocionar la marca Made in Italy, Chat GPT señalaba que se trata de “una herramienta poderosa para mejorar la eficiencia y la personalización de productos y servicios” a través de un análisis de datos de tendencias de consumo o la optimización de procesos de producción, entre otros. Rocco Lozano se mostraba en desacuerdo pues a su juicio, la IA no es radicalmente innovadora. “La humanidad se ha transformado con grandes preguntas. La tecnología genera respuestas más rápidas, pero ¿quién transforma esas preguntas?”, se cuestionaba. Por ello, “se van a necesitar genios italianos para seguir innovando”.
La segunda cuestión planteada se centró en el mundo de la ciencia intentando dar luz sobre por qué la investigación de tecnologías se les da tan bien a los italianos. La investigadora Nanda Rea explicaba que el quid de la cuestión en esta materia está en su capacidad de ir más allá de lo que viene en los libros. “En las escuelas italianas te enseñan esto, el ir más allá, algo que es básico para innovar. Es algo que nos viene a nivel histórico”, relataba. Por su parte, Chat GPT enumeraba varias razones de esta genialidad italiana en ciencia. Entre ellas, las universidades de renombre mundial, el valor de la innovación y contar con un legado marcado por nombres como los de da Vinci o Galileo.
Ahondando aún más en el mundo científico, la periodista Laila Jiménez preguntó sobre el próximo desafío en la tecnología de ondas gravitacionales. En este sentido, mientras el sistema de IA Gemini ofrecía una respuesta más técnica, Nanda abría la respuesta poniendo en contexto la situación de las ondas gravitacionales y auguraba que en los próximos años “vamos a ver con otros ojos el universo”.
Del mundo científico pasamos al gastronómico ya que Italia también es reconocida mundialmente por su gastronomía. Bien lo sabe el chef Andrea Tumbarello que recordaba cómo la cocina italiana es más que pasta y pizza. “Te ofrece una variedad de productos y platos que puedes comer diariamente, algo que no pasa con otras cocinas”, aseguraba. Por su parte, Gemini se centró en explicar cómo los chefs italianos están experimentando con técnicas modernas con la fusión con otras cocinas y sabores, presentando los platos de otras maneras y apostando por experiencias culinarias, sin olvidar de destacar la importancia de los ingredientes mediterráneos y las técnicas de cocción tradicional.
A la pregunta de por qué la cocina italiana debería ser reconocida como patrimonio inmaterial de la UNESCO, Chat GPT apuntaba en su respuesta a su influencia en otras gastronomías, en su valor en los mercados de todo el mundo promoviendo su valor cultural, y la calidad de los productos y los platos italianos. A pesar de reconocer que la IA es “más fría” en sus respuestas, en esta ocasión Tumbarello se mostraba de acuerdo en los motivos dados por Chat GPT para reconocer a la cocina italiana como patrimonio inmaterial de la UNESCO.
El diseño italiano fue otro de los temas analizados en este desafío. La arquitecta Beatriz Silveira fue la encargada de poner foco en los principales retos necesarios para mantener la autenticidad del diseño Made in Italy en la era de la globalización. En la cuna de la búsqueda de la belleza por excelencia, Silveira decía que “como cualquier disciplina que requiere creatividad, el diseño italiano tiene alma y corazón”. Asimismo, hacía hincapié en el valor del diseño original en tiempos de globalización, de las cosas hechas a mano, de la artesanía, y también de las ganas de crear más y mejor. “Esas ganas de superarse es lo que me mueve en mi trabajo. Está por ver la capacidad de la IA para superarse”, afirmaba. Chat GPT, por su parte, respondía a estos retos centrándose en la competencia de mercados, la presión por reducir los costos de promoción o la adaptación a los cambios en los gustos de los consumidores.
La IA también respondió sobre cómo combinar la innovación y evolución que caracterizan al Salone del Mobile de Milán con la tradición del diseño italiano. Gemini apuntaba a la exploración que realizan los diseñadores de conceptos convencionales junto con los más tradicionales, combinando materiales reciclables y una producción artesana. Silveira daba al público su visión más personal al relatar su experiencia en este “gran centro de diseño para el sector”. “Allí me recargo de energía y de creatividad de las personas” que acuden. Además, esta arquitecta miraba al futuro al señalar que lo importante “no es la evolución sino hacia dónde evolucionamos”. A su juicio, este camino debe pasar por “llevar el diseño al servicio de lo humano para ser felices”; algo que debe hacerse “con conciencia y de manera sostenible para crear y generar riqueza”.
Italia es también un referente en moda a nivel internacional. La modelo Inés Sastre, que ha desfilado por las pasarelas más importantes del mundo, mencionaba algunas de las características distintivas de la moda italiana y que explican su renombre global. “Los italianos son creadores, unos verdaderos artistas”, decía. Para Sastre, esta industria mezcla tradición e innovación transmitiendo un “amor por Italia”. Según la modelo española, en la industria de la moda italiana tiene una parte muy importante el contacto con el cliente. “Es algo más que comprarse un traje, es un sector que tiene espíritu”, remarcaba. Preguntado por la misma cuestión, Gemini se centraba en los aspectos que hacen conocida a la moda italiana: su artesanía, tejidos como la seda y el cuero, sus talentos creativos y sus diseñadores conocidos por su innovación.
La también actriz explicaba cómo el cine contribuye a la difusión de la moda italiana y recordaba películas como El diablo viste de Prada. Chat GPT señalaba que el séptimo arte es una plataforma para mostrar el trabajo de diseñadores, estilos y marcas italianas, como Prada, Versace o Gucci.
El último tema abordado en este reto fue el turismo. El periodista y escritor Carlos Pascual analizó las que a su juicio son las razones que motivan al turista español a viajar a Italia. Entre estos motivos están el arte, el patrimonio cultural, la gastronomía, el idioma “cercano al español”, sus paisajes y la cercanía física. “En el podium de destinos para los españoles siempre está Italia”, aseguraba. El Chat GPT coincidía con Pascual a la hora de establecer los aspectos más atractivos para viajar a Italia, y apuntaba cómo ha crecido el número de turistas internacionales en los últimos años.
A Gemini se le preguntó por la experiencia de viajar a Florencia por primera vez. Este modelo de IA respondió recomendando las obras artísticas que ver, la cocina toscana a probar en algún restaurante local, las boutiques en las que poder comprar y dejó la recomendación de contratar un guía local. “No ha dicho algo que para mí es importante: el sentimiento”, decía Pascual. A su juicio, hay dos aspectos clave a la hora de hacer turismo: el conocimiento y la emoción. “El conocimiento es lo que nos puede decir la IA, pero para la emoción no existen guías. Eres tú el que tiene que descubrir y sentir lo que estás viendo”, remataba.
Una vez finalizadas las preguntas, Naira Colagreco, estudiante de la escuela italiana en Madrid, realizó una serie de conclusiones sobre este reto para poner el broche final a esta cita. Colagreco destacó la “información de la IA frente a la relevancia de la emoción” que aporta el ser humano. “Con la IA no tendremos ese diálogo fluido y una dialéctica rica”, aseguraba. Asimismo, esta estudiante dibujó un escenario en el que ve a la sociedad dividida ante la llegada de la inteligencia artificial entre los que la dan una gran acogida y los que tienen una posición más reaccionaria. Por otro lado, esta joven mostró la preocupación de su generación sobre cómo la IA puede afectar a su futuro e impactar, por ejemplo, en el empleo, pero al mismo tiempo se mostró confiada en el avance de las tecnologías para potenciar el desarrollo de la humanidad.