En su momento ni siquiera el propio Berners-Lee podía imaginar lo que tenía entre manos. Tenía apenas 34 años y trabajaba en el Centro Europeo de Fïsica de Partículas (CERN) de Suiza. Y precisamente para esto creó la gran WWW, para mejorar la gestión en ese centro. Este proyecto aún no se llamaba así, si no Mesh, ya que el término World Wide Web no se implantó hasta finales de los años 90. A este proyecto su superior, el físico Mike Sendall, le respondió con un escueto y contundente: “poco preciso, pero interesante”. Interesante lo fue, desde luego. Y ahora que se cumplen 25 años, su creador sólo pide que en cualquier lugar del mundo se tenga acceso a la red.
“Estábamos en 1989, internet ya existía, podíamos enviar correos pero no existían las páginas en la red. No existía el http o el html. No se podía consultar una página para ver su contenido. Empecé a sentirme muy frustrado por ello. Imaginé un sistema en el que, de manera sencilla, una persona podía visitar una página tras otra y a partir de ahí decidí lo que quería construir”, afirma Berners-Lee.
¿Cuál será el futuro de la Web? El padre de la Web, lo contó en TED 2009.