La Editorial SM ha pactado con los sindicatos rebajar el número de afectados por el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) a 130 trabajadores, el 20% de la plantilla.
Este acuerdo se ha alcanzado después de que a principios del mes de marzo el grupo propusiese un ERE que afectaba al 30% de la plantilla, unos 197 trabajadores, y que cumplía los mínimos requisitos legales en cuanto a indemnizaciones.
De esta manera, según han informado fuentes del colectivo de trabajadores del grupo, la negociación entre los representantes de la empresa y la representación legal de los empleados ha logrado mejorar las condiciones hasta alcanzar una compensación de 30 días por año trabajado y un máximo de 18 mensualidades.
ADHERIRSE DE MANERA VOLUNTARIA
Además, después de casi un mes de movilizaciones y propuestas, también se ha conseguido que los trabajadores puedan adherirse de manera voluntaria al mencionado ERE hasta el 23 de marzo, condición que la empresa no contemplaba en un principio.
Ratificado el pacto, este recoge que las 130 personas que han quedado afectadas, del total de 685 trabajadores actuales, recibirán la comunicación en el mes de abril. No obstante, y aunque la mayoría de las personas serán despedidas ese mismo mes, una parte de los trabajadores saldrán en el mes de junio.
Los empleados han lamentado que se haya llegado a esta situación «debido, en enorme medida, a una mala gestión y planificación de la anterior campaña de libros de texto», según un comunicado del colectivo laboral ante el ERE del Grupo SM.
EL GRUPO «BUSCA SER MÁS SOSTENIBLE»
«Una vez más, el sufrimiento generado por una supuesta crisis económica propiciada por los dirigentes de la empresa va a recaer de manera desproporcionada en quienes no la han provocado», ha denunciado el colectivo.
Asimismo, ha señalado que la situación de precariedad que ya vive la mayoría de la plantilla, con salarios congelados prácticamente desde 2009, «se verá agravada por estos despidos».
Desde la empresa justifican que con estos despidos masivos «busca ser más sostenible», aunque no aporta ningún plan de viabilidad para ello, igual que hace dos años cuando sometieron a la plantilla a un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE), ha recordado el colectivo.