El Gobierno de Bolivia arrancará este martes las negociaciones con la Central Obrera Boliviana (COB), el mayor sindicato del país, para fijar un incremento del salario mínimo, que la organización espera que sea del 8% para este año.
Una vez que se ha instalado la Comisión Productiva el pasado lunes, ambas partes comenzarán a debatir el pliego de peticiones que ha presentado el sindicato boliviano al Gobierno, con el objetivo de mejorar las condiciones laborales de los trabajadores del país, iniciando por un aumento del salario mínimo.
En 2023, el Ejecutivo y el sindicato llegaron a un acuerdo para elevar el salario mínimo en un 5%, lo que permitió llevar la cifra desde los 2.250 bolivianos (unos 300 euros) a 2.362 bolivianos (315 euros).
Cada año, el Ministerio de Trabajo es el que encabeza esta comisión a solicitud de la Central Obrera Boliviana y espera llegar al 1 de mayo (Día Internacional del Trabajador) con ciertos avances en materia laboral.
Es instrucción del presidente del país, Luis Arce, que el Ministerio de Trabajo y el Gobierno en pleno atienda todas las demandas de los trabajadores, expresadas en su pliego petitorio y que este se aborde «punto por punto».