Economía

El consumo de vermut, tinto de verano y bitter se eleva en 2023, impulsado por el aperitivo

El aperitivo se consolida en 2023 como uno de los momentos de consumo que más ha crecido, ya que un 55% de los españoles reconoce que sale a tomar al aperitivo los fines de semana, lo que ha impulsado a categorías como el vermut, que ha incrementado su demanda en un 9%, el tinto de verano en un 25% o el bitter en un 4%, según el informe Tendencias de Mercado en Horeca de NIQ.

En concreto, la consultora ha identificado una tendencia en estas salidas fuera del hogar, en las que el consumidor aplica la ‘psicología de la premiumización’ o ‘presupuesto de cerebro dividido’, es decir, que recorta en gastos intermedios, pero a la hora de salir a tomar algo o ir de vacaciones no repara en gastos.

De esta forma, el 46% de los españoles prefiere tomarse dos bebidas premium en lugar del 26% que dice opta por tres de calidad media. Unos datos que comparados con otros países de Europa, sitúa a España en el primer puesto de los que prefieren bebidas premium.

No obstante, la demanda del consumo de bebidas fuera de casa disminuyó un 1,4% el año pasado, debido principalmente por la subida de precios en hostelería, que se incrementó hasta un 7% de media en las copas y del 9% en la cerveza y el agua.

Así, bares y cafeterías sufrieron una caída en la demanda del 3,3%, mientras que hoteles y restaurantes lo hicieron en un 1,6%. Por su parte, los locales de ocio nocturno vieron como se elevaba la demanda en un 0,8%, mientras que la restauración organizada registraron un alza del 10%.

Sin embargo, la mayoría de los españoles (56%) considera que salir es un gasto asequible, por lo que un 83% reconoce que visita al menos un establecimiento de hostelería a la semana.

Por categorías, la cerveza acapara prácticamente la mitad del gasto en bebidas (45,5%), seguida de los refrescos, aunque no son las bebidas que más crecieron durante el pasado año, ya que el cambio en las tendencias de consumo provocado por la situación de precios altos, ha beneficiado a algunas bebidas como pueden ser los licores que se consumen para socializar después de comer o los vinos.

El informe muestra la apuesta del consumidor por la vida saludable, ya que se eleva el consumo de bebidas sin alcohol. Así, se registran crecimientos destacados en agua con gas, zumos, bebidas de té e isotónicas, un 81% de los españoles afirma que ha consumido cerveza, vino o destilados sin alcohol o de graduación más baja que los tradicionales, productos que han conseguido una gran penetración.

El informe advierte de que la caída de la demanda puede provocar el cierre de establecimientos en un marco de parque de bares ya recortado por el Covid, aunque recuerda que se está produciendo una transformación en la tipología de los establecimientos en España, pasando del bar tradicional hacia una restauración más profesionalizada.

En el contexto actual y ante un panorama incierto, el 38% de los responsables de los bares se muestran optimistas, ya que piensan que su negocio irá bien en los próximos seis meses.