La Comisión Federal de Comercio (FTC) de Estados Unidos ha presentado una demanda para bloquear la adquisición por 24.600 millones de dólares (22.695 millones de euros) de la cadena de supermercados Albertsons Companies por parte de su rival Kroger, al considerar que el acuerdo dañaría la competencia.
Según la FTC, el acuerdo propuesto, que representa la mayor fusión entre supermercados en la historia de EE.UU., eliminará la «feroz competencia» entre Kroger y Albertsons, lo que provocará precios más altos en alimentación y otros artículos domésticos esenciales para millones de estadounidenses.
En este sentido, recuerda que los propios ejecutivos de Kroger y Albertsons han reconocido que los dos supermercados son competidores directos, lo que se obliga entre sí a competir agresivamente por los clientes reduciendo los precios y por los empleados al ofrecer mejores salarios y beneficios en todo el país. «Básicamente, con la fusión se está creando un monopolio en el sector de comestibles», habría llegado a admitir un ejecutivo al respecto.
Asimismo, la FTC advierte de que la menor competencia conducirá también a productos y servicios de menor calidad, al tiempo que reducirá las opciones de los consumidores sobre dónde comprar, mientras que para miles de trabajadores la transacción borraría inmediatamente la competencia por la fuerza laboral, amenazando la capacidad de los empleados de obtener salarios más altos, mejores prestaciones y mejores condiciones laborales.
«La adquisición propuesta es, con diferencia, la mayor fusión de supermercados en la historia de Estados Unidos. Si se permite, esta fusión reduciría sustancialmente la competencia, lo que probablemente resultaría en que los estadounidenses pagaran millones de dólares más por alimentos y otros artículos domésticos esenciales, además de reducir la capacidad de cientos de miles de trabajadores para obtener mejores salarios y beneficios», señala en su demanda.
Por otro lado, sostiene que la propuesta de las empresas de vender varios cientos de tiendas y seleccionar otros activos para C&S Wholesale Grocers (C&S), que hoy opera sólo 23 supermercados y una sola farmacia minorista, con el fin de asegurar la aprobación antimonopolio de la fusión «está muy lejos de mitigar la competencia perdida entre Kroger y Albertsons», ya que C&S enfrentaría obstáculos significativos para unir las diversas partes y piezas de Kroger y Albertsons en un negocio que funcione, y mucho menos un competidor exitoso.
Kroger opera miles de tiendas en 36 estados, lo que incluye marcas regionales como Fred Meyer, Fry’s, Harris Teeter, King Soopers, Kroger y Quality Food Centers (QFC), mientras que Albertsons también opera miles de tiendas en 35 estados con nombres regionales que incluyen Albertsons, Haggen, Jewel-Osco, Pavilions, Safeway y Vons. Si se completara la fusión, Kroger y Albertsons operarían más de 5.000 tiendas y aproximadamente 4.000 farmacias minoristas y emplearían a casi 700.000 empleados en 48 estados.
«Esta megafusión de supermercados se produce cuando los consumidores estadounidenses han visto cómo el coste de los alimentos aumenta constantemente en los últimos años. La adquisición de Albertsons por parte de Kroger daría lugar a aumentos adicionales en los precios de los productos de uso cotidiano, exacerbando aún más la tensión financiera que enfrentan hoy los consumidores en todo el país», dijo Henry Liu, director de la Oficina de Competencia de la FTC.