El Gobierno de Argentina y el Fondo Monetario Internacional (FMI) han llegado este miércoles a un acuerdo para desembolsar al país 4.650 millones de dólares (unos 4.200 millones de euros) en el marco de la séptima revisión del Programa de Facilidades Extendidas (SAF).
«El personal técnico del FMI y las autoridades argentinas han alcanzado un acuerdo sobre la séptima revisión en el marco del acuerdo SAF de Argentina. Sujeto a la aprobación del directorio ejecutivo del FMI, Argentina tendría acceso a unos 4.700 millones de dólares», ha publicado la organización monetaria en su página web.
Así, el FMI ha explicado que el acuerdo ha sido alcanzado sobre un «conjunto reforzado de políticas» que llevarán a la restauración de la estabilidad macroeconómica del país y al encarrilamiento del actual programa después de que sus objetivos clave «no se hayan alcanzado por amplios márgenes debido a los graves reveses políticos del Gobierno anterior».
En ese sentido, ha elogiado las políticas del Gobierno del ultraliberal Javier Milei, a las que ha calificado de «ambicioso plan de estabilización» que incluyen «una amplia consolidación fiscal inicial», «medidas para reconstituir las reservas, corregir los desajustes de los precios relativos, reforzar el balance del Banco Central y crear una economía más simple, basada en normas y orientada al mercado», así como «el aumento de la asistencia social para proteger a los más vulnerables».
Este desembolso, que servirá para pagar los vencimientos de capital correspondientes a diciembre, enero y abril, estaba previsto para noviembre, pero el cambio de Gobierno retrasó las conversaciones.
El pasado lunes, el portavoz del Gobierno de Argentina, Manuel Adorni, explicó que no estaban buscando un nuevo programa en las conversaciones con el FMI, ni estaban solicitando nueva financiación más allá de su actual programa de ayuda de 44.000 millones de dólares (40.100 millones de euros).