Las grandes empresas de transporte marítimo de mercancías se preparan para reanudar sus operaciones a través de la ruta del mar Rojo y el golfo de Adén en su paso hacia y desde el Canal de Suez, después del despliegue de una iniciativa multinacional liderada por Estados Unidos para abordar los problemas de seguridad en la zona planteados por los militantes hutíes.
El gigante danés Maersk, la segunda mayor compañía mundial del sector, que interrumpió el tráfico de sus buques portacontenedores por la ruta del mar Rojo el pasado 15 de diciembre, ha indicado que, tras confirmarse la iniciativa de seguridad multinacional Operación Guardián de la Prosperidad (OPG) para permitir el tránsito del comercio marítimo en la zona se está preparando para ordenar a sus buques usar de nuevo esta ruta hacia y desde el Canal de Suez.
«Con la iniciativa OPG en funcionamiento, nos estamos preparando para permitir que los buques reanuden el tránsito por el mar Rojo tanto en dirección este como en dirección oeste», ha anunciado la multinacional danesa.
No obstante, la empresa advierte de que sus equipos aún están evaluando los efectos inmediatos de la resolución y subraya que, a pesar de que existen medidas de seguridad para permitir el tránsito por el mar Rojo/golfo de Adén, el riesgo general en la zona no se elimina en esta etapa y Maersk no dudará en reevaluar la situación y una vez más iniciar planes de desvío si lo considera necesario.
De su lado, la compañía alemana de transporte marítimo Hapag-Lloyd, que también decidió el 15 de diciembre suspender el tránsito de sus barcos por la ruta del mar Rojo, tiene previsto tomar una decisión al respecto este miércoles, según confirmó un portavoz de la compañía a la cadena CNBC.