Nautik Magazine

Cuaderno de Bitácora | Capitán Salmón, 20 de noviembre

Pablo Alzugaray es navegante y una de las personas más creativas en el mundo de los negocios. Ahora, escribe para Forbes Nautik su particular ‘Cuaderno de Bitácora’ mientras cruza el Atlántico

Volver a navegar me devuelve a este ejercicio diario, practicado por las noches. A quienes escribieron reclamando entregas, durante estos días de silencio de radio, explico que lo suspendí deliberadamente, con la mejor intención y desde la consideración de que un cuaderno de bitácora no puede ser tal estando en puerto.

Reparaciones, pruebas y nuevos aprovisionamientos ocuparon los tres días largos, atracados en la Marina Rubicón, en el Sur de Lanzarote.

Pero el mediodía del sábado se extendió, generoso, a algo más de medio día, para percibir lo mínimo de este lugar increíble, cuyo nombre parece deber al navegante genovés Lanceloto Malocello, que en el medioevo redescubriera una tierra de volcanes a la que los majos –aborígenes de las actuales Islas Canarias– llamaron antes Titerogakaet, proveniente del tuareg Tetergaget, «la que está quemada»

Merece mención significativa lo hecho por Jhean IV de Béthencourt, Barón de Saint-Martin-le-Gaillard y antepasado directo de mi amigo y socio, Abelardo Bethencourt, con quien cada día comparto eso que llamamos vida normal, sin la menor idea de semejante abolengo. Este, nombrado también Señor de las Islas Canarias fue quien en 1402, al servicio de Enrique III de Castilla, y al mando de una nave con otros 63 normandos, conquistase definitivamente la isla, para establecer en su costa meridional una primera fortificación a la que llamó, precisamente, Rubicón.

Poco tiempo después, en audiencia con el rey de Castilla, «Señor, vengo a pediros socorros, si es que os place darme permiso para conquistar a la fe cristiana las islas llamadas Canarias. Como sois rey y señor de todos los países inmediatos y el más próximo de los reyes cristianos, vengo a implorar vuestra gracia y a haceros homenaje de mis conquistas».

Recorrimos la Geria, y sus centenarias vides, tan inesperadas como tenaces. Nos asomamos a Timanfaya. No puedo asegurar que él se enterase, pero nos encontramos con John McEnroe bebiendo vino en un bar de Teguise, capital de la isla hasta 1847. Y terminamos descubriendo la Caleta de Famara, al pie de su homónimo y descomunal risco. 

Ayer domingo, a las 10:00, soltamos en Lanzarote. Buscamos al sudoeste, rumbo 225º, a unos alisios que no acaban de encontrarnos. Por nuestro babor, Fuerteventura y a estribor, ya por la noche, Gran Canaria. El plan es seguir bajando, hacia Cabo Verde, pero con la esperanza de no llegar, porque antes nos rescate el aire liso permitiéndonos subir los grados en nuestro compás.

En Lanzarote damos la bienvenida a dos nuevos tripulantes. Matías Ibarra y Fernando Retegui, marinos cuya experiencia nos mejora y refuerza. Ambos argentinos y los dos tienen innata esa camaradería propia de quienes eligen vivir para navegar. Los estoy conociendo, pero Matías parece capaz de saber siempre lo que hay que hacer y Fernando es un purista de los que no negocia sobre nada de lo que ocurre abordo. 

Anoche, y gracias este ingenio asombroso llamado Starlink, que funciona tan bien que hasta le vamos a perdonar la literalidad sosa de su nombre, con el Mono vivimos, de guardia y con el directo de nuestro Canal 13, la victoria de Javier Milei. Nos gustaron las palabras elegantes y deportivas, de Sergio Massa y, por enésima vez, ilusionamos soñando con la recuperación del país en el que nacimos, subidos a una expresión muy de allá: “Y si esta vez funciona…”.

Antes del amanecer, no perder velocidad nos exige orzar hasta 20º. Pero poco a poco el viento va arreciando y pudimos recuperar curso.

Termino de revisar estas líneas cuando asoma el Sol. HBR -hora reloj de bitácora- 7:27 del lunes. Los primeros emails desde las oficinas nos recuerdan a todos que en Madrid está empezando otra semana intensa. 

Un abrazo desde 27º 23.950 N · 15º 39.388 O, el mejor lugar del mundo para estar hoy. 

Capitán Salmón

Socio-cofundador de la agencia de marketing Ernest