La petrolera británica BP registró un beneficio neto atribuido de 14.868 millones de dólares (14.015 millones de euros) durante los nueve primeros meses de 2023, frente a las pérdidas de 13.290 millones de dólares (12.528 millones de euros) que se anotaron en el periodo equivalente del año pasado, según ha informado la empresa.
El resultado subyacente de BP ajustado por costes de reposición alcanzó los 10.845 millones de dólares (10.223 millones de euros), lo que representa una caída del 52,5% en comparación con la cifra contabilizada entre enero y septiembre de 2022.
Los ingresos ascendieron a 160.446 millones de dólares (151.244 millones de euros), un 10,1% menos. De estos, el grueso de los mismos, con 157.989 millones de dólares (148.928 millones de euros), procedieron de las ventas en sí de la compañía, mientras que el montante restante procedió de ‘joint-ventures’, socios o intereses.
Por sectores, las ventas a clientes de productos fueron de 119.369 millones de dólares (112.523 millones de euros), al tiempo que la división de gas y energías bajas en carbono facturó 36.884 millones de dólares (34.769 millones de euros), un 17,5% menos y un 59,6% más, respectivamente. Además, la producción de petróleo y otros negocios brindaron 911 millones de dólares (858,8 millones de euros) y 825 millones de dólares (777,7 millones de euros).
De su lado, los gastos en los que se incurrieron fueron de 135.174 millones de dólares (127.421 millones de euros), un 24,2% menos. La petrolera británica ha informado de que las compras fueron de 88.245 millones de dólares (83.184 millones de euros), un 17,5% menos, mientras que el resto de conceptos, como los costes de producción, depreciación o distribución mantuvieron unas cifras similares a las de los doce meses anteriores.
Sin embargo, BP redujo en un 92,9% la cantidad por deterioro hasta los 1.899 millones de dólares (1.790 millones de euros), tras dejar atrás el efecto adverso de 25.500 millones de dólares (24.037 millones de euros) en relación con la desinversión de BP en Rosneft y otros proyectos conjuntos tras el estallido de la guerra en Ucrania.
Ya en el tercer trimestre, las ganancias netas alcanzaron los 4.858 millones de dólares (4.579 millones de euros) en contraste con las pérdidas de 1.984 millones de dólares (1.870 millones de euros) del mismo trimestre de 2022. Los ingresos totales se situaron en los 54.016 millones de dólares (50.918 millones de euros), un 6,6% menos.
«BP ha obtenido un flujo de caja operativo sólido en el trimestre al tiempo que continuamos ejecutando nuestro marco financiero sin cambios», ha explicado la directora financiera interina de BP, Kate Thomson, que ha destacado, también, que la deuda neta del grupo se contuvo en 1.300 millones de dólares (1.225 millones de euros), hasta los 22.300 millones de dólares (21.021 millones de euros).
DIVIDENDO Y RECOMPRA
La petrolera ha anunciado un dividendo por el tercer trimestre de 7,27 centavos (0,069 euros) por acción ordinaria, además del lanzamiento antes de la publicación de los resultados del cuarto trimestre de un nuevo programa de recompra de acciones propias de 1.500 millones de dólares (1.414 millones de euros).
Al establecer el dividendo por acción ordinaria y la recompra cada trimestre, ha indicado la multinacional, la junta continuará teniendo en cuenta factores que incluyen el nivel acumulativo y la perspectiva del flujo de efectivo excedente, el punto de equilibrio de efectivo y el mantenimiento de una robusta calificación crediticia de grado de inversión.
En este sentido, BP mantiene sin cambios la orientación sobre futuras distribuciones y, sobre la base de un precio de 60 dólares (56,56 euros) por barril Brent, espera poder realizar recompras de acciones de alrededor de 4.000 millones de dólares (3.771 millones de euros) al año y tener capacidad para un incremento anual del dividendo por acción ordinaria del orden del 4%.