La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) ha reclamado «medidas urgentes» a nivel europeo contra la competencia desleal de las importaciones de terceros países en el sector del tomate, según informa en un comunicado.
El responsable de frutas y hortalizas de COAG, Andrés Góngora, ha participado en la reunión del Observatorio del Mercado de Tomate de la UE y ha demandado la puesta en marcha inmediata de actuaciones que reviertan la actual indefensión en frontera frente a importaciones de países como Marruecos o Turquía que palíen los daños en la rentabilidad de las personas productoras en España y en toda la UE.
En el encuentro, la organización agraria ha reclamado la inclusión del cumplimiento de las normas europeas de producción en los acuerdos comerciales con terceros países, la revisión del sistema de precios de entrada, la reducción del contingente de tomate con beneficios arancelarios por la salida del Reino Unido de la UE y la aplicación de medidas de salvaguardia en los momentos de perturbación grave de los mercados, cosa que ocurre año tras año por las importaciones de terceros países.
De esta forma, el Gobierno de Marruecos anunció esta semana que va a subvencionar la producción de tomate, junto a la de cebollas y patatas, con entre el 50% y el 70% de su valor. En concreto, la producción de tomates recibirá un apoyo de entre 3.600 y 6.300 euros por hectárea. Además, las empresas productoras alauitas se verán beneficiadas de una subvención a los fertilizantes nitrogenados de 200 millones de euros y de la movilización de 600.000 toneladas de fertilizantes fosfatados.
COAG explica que esto se suma al fuerte impulso del Gobierno marroquí a sus producciones hortofrutícolas a través del Plan Marruecos Verde y del Plan Generación Green, así como por la incorporación fraudulenta de las producciones del Sahara Occidental como propias a efectos de beneficiarse de las concesiones arancelarias.
«Mientras aquí nos dedicamos a desregular la entrada de producto de terceros países, nuestros competidores refuerzan las ayudas a la agroexportación, con medidas que caerían en la ilegalidad, ahondando más en el ‘dumping’ comercial frente a la producción europea de tomate», ha advertido Góngora.
El representante de COAG ha lamentado que «lo más grave de todo es que la Comisión Europea es consciente de ello y no parece querer poner
remedio». «Todo lo contrario, abandona a las personas que producimos y facilita que las empresas de aquí se vayan a producir fuera para que luego inunden nuestros mercados con producciones que dañan nuestra
rentabilidad. ¿Quiere la UE depender de Mohamed VI a la hora de elaborar sus ensaladas? A priori, resulta como mínimo inquietante», ha indicado.
De hecho, durante la reunión del Observatorio, la Comisión Europea ha presentado sus datos a medio plazo para el sector en los que prevé una importante caída del 21,5% de la superficie y del 22% de la producción de tomate fresco en España hasta 2035, precisamente por la competencia de Marruecos, entre otros factores.