La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) ha lamentado la innación del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación a la hora de proteger a los agricultores de almendra frente a los especuladores y le reclama que «se tome en serio la grave crisis» que sufre por las importaciones sin control y las nuevas plantaciones industriales auspiciadas por fondos de inversión, según informa en un comunicado.
El sector productor de frutos secos se ha reunido este martes en la sede del Ministerio de Agricultura en un encuentro para analizar la situación de la campaña de este producto, pero que ha terminado sin medidas ni decisiones políticas que permitan afrontar la «grave crisis» que sufren los agricultores de este sector.
UPA ha recordado que lleva semanas denunciando la situación que sufren los agricultores de almendra y reclamando una reunión de carácter político, al más alto nivel, para afrontar la situación del sector de la almendra y frenar las importaciones sin control procedentes de Estados Unidos, por un lado, y asegurar el cumplimiento de la Ley de Cadena Alimentaria, por otro.
«La almendra tradicional está arrinconada por las importaciones y las nuevas macroexplotaciones superintensivas sustentadas por fondos de inversión», ha señalado la responsable de frutos secos de UPA, Francisca Iglesias.
UPA ha propuesto que se impulse un etiquetado especial para poner en valor la almendra proveniente de cultivos familiares y en muchos casos bajo producción ecológica, que están quedando fuera del mercado, con la connivencia de los envasadores y de la industria turronera, que utiliza almendra como una de sus principales materias primas.
La organización agraria también ha reclamado a Agricultura que active un plan de control del cumplimiento de la Ley de la Cadena Alimentaria, una marca de calidad que reconozca a las almendras españolas, reformas en el seguro agrario de frutos secos y revisar el funcionamiento de las lonjas, para dotarlas de más transparencia y rigor.