Up & Down

Por qué los Millennials deberían empezar a hablar de sus herencias

Cuando eres joven no te preocupas por ciertos temas. No estoy diciendo que sean unos despreocupados o unos descreídos, para nada. Pero es cierto que cuando somos jóvenes vemos la vida con una perspectiva infinita, y pecamos de ingenuidad. Por ello no pensamos en herencias, o igual lo hacemos pero con una expectativa positiva de ella. Puede ser que quieres seguir los pasos de tus padres, o puede ocurrir todo lo contrario. De todas formas, las herencias pueden ser negativas, por ello hemos de tener en cuenta las siguientes posibilidades:

No solo vamos a heredar las ganancias familiares, también vamos a heredar los problemas familiares:

Las personas que no aprenden la historia están condenadas a repetirla. Este dicho tiene más razón que un santo. Parece ser que las generaciones están condenadas a repetir los errores de sus antepasados. Este ciclo es causado por dos factores: educación y comunicación, básicamente la falta de ambas. La falta de comunicación degenera en problemas de confianza, lo que genera peleas familiares. Habla de forma clara con tu familia acerca de su situación financiera y de cómo te puede afectar a ti en un futuro. Es mejor encontrar una solución ahora que cuando ya no exista remedio.

La preparación lo es todo:

Aunque no es la cosa más habitual del mundo, puede ser que recibas una gran herencia sin previo aviso. Puede que vivas en tu propio mundo y estés ajeno a las responsabilidades de tu futura herencia. Por ello debes empezar a preocuparte por los negocios familiares, por el futuro de tu empresa familiar. No importa cuán inteligente seas, o la experiencia que creas tener, si te ves expuesto a una situación en la cual tienes que asumir el liderazgo sin previo aviso, vas a verte perdido y abrumado. Además, recuerda que te tienes que enfrentar a la pérdida de un ser querido.

Millennials, esto va dirigido a vosotros. Olvidaos del mal trago que supone sacar a colación ciertos temas. Es vuestro futuro, y sois una generación que lo intenta labrar poco a poco, a pesar de todas las críticas recibidas.