En los últimos años, las empresas de muchos sectores han experimentado la escasez de mano de obra que se produjo tras una pandemia mundial, los problemas de abastecimiento de materiales a causa del conflicto ruso-ucraniano y la presión financiera general derivada de las fuertes subidas de las tasas de inflación. Estas dificultades obligaron a muchas empresas a modificar sus planes para centrarse en capear el temporal.
Como primera medida, las empresas recortaron los presupuestos de los servicios que no eran inmediatamente necesarios para sus operaciones.
Aunque recortar presupuestos durante una recesión económica es razonable, los responsables deben tomar estas decisiones de forma estratégica y tener presente el futuro para asegurarse de que sus organizaciones se encuentran en un buen lugar cuando amainen las dificultades.
La tecnología es un sector que puede sufrir recortes presupuestarios dentro de una organización cuando los tiempos son difíciles. Esto puede poner a una empresa en una posición difícil para aprovechar al máximo las oportunidades cuando salga por el otro lado.
Este artículo proporcionará varias razones por las que es fundamental seguir invirtiendo recursos en la tecnología de su empresa, incluso cuando se enfrenta a condiciones económicas difíciles.
La ciberseguridad siempre será directamente relevante para las operaciones empresariales
Los datos y la información de una empresa son algunos de sus activos más importantes. Las brechas de seguridad pueden suponer la pérdida de miles de dólares, por no hablar de la información sensible de la empresa. Cuando el negocio va lento, los especialistas en tecnología de una organización pueden tener más tiempo para blindar sus sistemas. Esto podría implicar nuevos sistemas de seguridad, desarrollar procesos organizativos más seguros o simplemente tomarse tiempo para reevaluar la seguridad de los sistemas actuales.
Es mucho mejor para una organización identificar las amenazas a la seguridad con antelación que descubrir los problemas cuando están al descubierto. Permitir que la seguridad falle antes de reemplazarla hace que una empresa sea vulnerable a los ciberataques, que pueden ser costosos de solucionar tanto en tiempo como en dinero.
Invierta en diferenciadores para mantenerse por delante de la competencia
Invertir tiempo y recursos en tecnología cuando los competidores no lo hacen creará una ventaja competitiva cuando los mercados vuelvan a repuntar. Tanto si las inversiones adoptan la forma de nuevo software, hardware o simplemente tiempo dedicado a desarrollar nuevas herramientas u ofertas de servicios, resulta rentable centrarse continuamente en la tecnología.
Cuando el negocio vuelva a repuntar, es ventajoso contar con elementos diferenciadores como nuevas herramientas y servicios en lugar de desarrollarlos sobre la marcha. Mantenerse al día en lo último en tecnología es necesario para estar un paso por delante de sus competidores.
Mejorar el servicio al cliente y la eficacia mediante la formación de los empleados
Invertir en tecnología no tiene por qué implicar gastar dinero. Si los responsables de la toma de decisiones se resisten a invertir fondos en nueva tecnología, una organización puede mantenerse a la vanguardia abordando las ineficiencias de los procesos mediante la educación y la formación continuas.
Un problema común para muchas empresas es que los empleados desarrollan malos hábitos con sus herramientas y procedimientos. Utilizar el tiempo extra en mercados lentos significa que una empresa está funcionando al máximo rendimiento y ya está preparada para una mayor carga de trabajo cuando el mercado vuelva a subir.
El servicio al cliente también es un enfoque valioso. Las empresas que se centran en ajustar y perfeccionar la experiencia del cliente estarán preparadas para dar lo mejor de sí mismas cuando aumente la carga de trabajo y conservarán más clientela que las que no invirtieron nada en formación durante una recesión.
Abordar la gobernanza de datos
Para liberar todo el potencial de los datos de una empresa en la mejora de la toma de decisiones, los datos deben registrarse, almacenarse y analizarse correctamente. Esto es especialmente importante durante una recesión económica porque hay un mayor nivel de escrutinio en los márgenes. Los datos que se muestran a los clientes potenciales y actuales deben ser correctos para garantizar que las ofertas de servicios y los elementos diferenciadores se comunican adecuadamente. Proporcionar datos precisos presentados a ejecutivos y analistas podría ser la diferencia en la retención de clientes, las decisiones estratégicas o incluso las cantidades presupuestadas.
También se trata de una cuestión de eficiencia. Incluso si se siguen los consejos anteriores sobre formación en eficiencia para los empleados, se necesitan datos precisos y una única fuente de verdad para que la nueva formación tenga un efecto beneficioso. Se trata de otra inversión que puede realizarse principalmente con tiempo y no con fondos.
Las inversiones tecnológicas meditadas durante las dificultades pagan dividendos más tarde
Puede ser un reto decidirse a hacer inversiones cuando el mercado está lento, pero es esencial mantener una mentalidad previsora para prepararse para que las luchas terminen.
Si una empresa quiere situarse en la mejor posición para aprovechar cualquier oportunidad que pueda surgir, no debe ser complaciente a la hora de examinar posibles inversiones tecnológicas. La tecnología avanza con rapidez y una empresa que sea demasiado cauta para invertir mientras el negocio va lento sólo conseguirá quedarse más rezagada.
Las empresas que realicen inversiones meditadas en su tecnología, ya sea comprando nuevos sistemas o dedicando tiempo de sus empleados al desarrollo y la formación, saldrán de las dificultades financieras preparadas para desplegar sus elementos diferenciadores con la mayor eficacia.