La Autoritat Catalana de la Competència (ACCO) de la Generalitat ha sancionado con 122.910 euros a Élite Taxi por infringir la Ley de defensa de la competencia por una «recomendación colectiva de boicot a Uber y otros operadores» que implica una infracción muy grave del artículo 1.1 de la Ley de Defensa de la Competencia (LDC).
La resolución, publicada este martes y consultada por Europa Press, concreta que esa recomendación se dirigió a los taxistas del Área Metropolitana de Barcelona (AMB) «con la finalidad de evitar que se registrasen en la plataforma de mediación del servicio de taxi mediante app de Uber o de otros operadores».
Esta resolución también obliga a Élite Taxi al «cese de la conducta infractora y a abstenerse, en adelante, de realizar conductas similares a la identificada en la resolución».
En un comunicado, el organismo de la Generalitat ha afirmado que, en 2020 y tras el anuncio de Uber de iniciar un servicio de mediación de taxi mediante aplicaciones móviles, Élite Taxi «inició una campaña de presión con el objetivo de que los taxistas de la AMB no se adhirieran a la plataforma».
Considerado que la entidad difundió «por diversos medios una imagen negativa y de desprestigio de Uber» y presionó a los taxistas a través de comunicaciones en redes sociales, en su sitio web o mediante llamadas directas advirtiéndoles de las consecuencias negativas de trabajar con la empresa, según la ACCO.
ACCIONES CONTRA TAXISTAS
También ha constatado la voluntad de la asociación de «llevar a cabo diversas acciones contra los taxistas que utilizaran la aplicación de Uber u otros operadores» y que difundió datos personales de los taxistas adheridos y se obstaculizó su actividad.
Según la ACCO, la «finalidad de la conducta de Élite era obstaculizar la prestación de servicios de mediación por parte de Uber y otros operadores en la contratación de trayectos en taxi en la AMB mediante app y, en consecuencia, impedir la entrada o la consolidación en el mercado de las referidas empresas».