Las peticiones de partidos nacionalistas catalanes de hacerse con el control de importantes infraestructuras de transporte españolas desmembrando la parte catalana de compañías como Renfe o Aena es, en opinión del presidente del gestor aeroportuario, Maurici Lucena, «ruido vacío», e insiste en que «esta situación no está sobre la mesa».
Desmembrar Renfe y Aena podría estar entre las exigencias que los nacionalistas catalanes propondrían al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez a cambio de darle su apoyo para sacar adelante su investidura como próximo jefe del Ejecutivo español.
La lista de reclamaciones de Junts incluye el traspaso a la Generalitat del servicio de Rodalies y de las carreteras titularidad del Estado, de los aeropuertos de Barcelona, Girona, Reus y Sabadell, actualmente en manos de Aena; de los puertos de Barcelona y Tarragona, en manos de Puertos del Estado; del Consorcio de la Zona Franca de Barcelona. La reclamación del servicio de las Cercanías catalanas también está en la agenda de su rival regional, ERC, que ya ha mostrado su intención de exigírselo al PSOE de Pedro Sánchez para facilitar su investidura.
Por lo tanto si el presidente de Gobierno, Pedro Sánchez reeditara su Ejecutivo de coalición con el apoyo de partidos como ERC y Junts per Catalunya, estos podrían poner sobre la mesa de negociación varias reivindicaciones, algunas de gran relevancia referidas a importantes infraestructuras del país como pueden ser aeropuertos y ferrocarriles.
Y es que ambas formaciones ya han anunciado que aspiran a conseguir el control tanto del servicio de Cercanías catalanas, Rodalies, como del principal aeropuerto de esta Comunidad Autónoma, Barcelona-El Prat.
El aeropuerto Josep Tarradellas-Barcelona El Prat es el segundo en número de pasajeros del país tras el aeropuerto de Adolfo Suárez Madrid-Barajas y la Generalitat también aspira desde hace años a hacerse con su control. Pero el Estado, por el momento, no ha cedido a las presiones.
Desde el Gobierno no han mostrado por el momento predisposición alguna a romper el modelo en red con el que opera Aena y del que El Prat, que se considera un aeropuerto de interés general, es pieza clave.
Una decisión confirmada y reiterada este miércoles durante la presentación de resultados semestrales por el máximo directivo del gestor aeroportuario español, del que el Estado posee el 51%, que asegura que todo lo publicado es «ruido vacío».
«Creo que Aena es un modelo muy estable con un fuerte crecimiento. Todo el mundo está de acuerdo en la compañía funciona bien y reconoce la fortaleza de nuestro modelo de red», explicó el directivo, que envió un mensaje de tranquilidad a todos los accionistas, especialmente a los accionistas privados, reiterando que «esta situación no está en la mesa».
«Es ruido vacío. Es realmente lamentable que precisamente en el día en que publicamos resultados semestrales, algo así pueda perturbar la imagen actual de la compañía en un momento en que la situación de la empresa es realmente buena», concluyó el directivo quien mostró su satisfacción por los «extraordinarios» resultados de la compañía que rozó los 608 millones de beneficio neto en el primer semestre del año.