Ingeniero naval y oceánico por la Universidad Politécnica de Madrid y funcionario del Cuerpo de Ingenieros Navales desde 2004, Benito Núñez (Albacete, 1976) es director general de la Marina Mercante desde junio del 2018, el órgano directivo de la Administración General del Estado encargado de velar por la aplicación de las normas nacionales e internacionales relacionadas con la seguridad de la vida humana en el mar y la protección del medio marino.
En esta entrevista con Forbes Nautik aborda alguno de los asuntos que despiertan más interés en el sector marítimo y cómo afronta el presente y el futuro del sector naval.
PREGUNTA. ¿Cómo llega al mundo naval?
RESPUESTA. Por pura casualidad, la verdad. Cuando acabé el COU –el antiguo curso de orientación universitaria– quise estudiar una ingeniería y vi, también por casualidad, el plan de estudios de Ingeniería Naval. Me pareció que era bonito y así empezó todo: me hice ingeniero naval y he acabado trabajando en el sector marítimo
P. ¿Tiene barco?
R. No, no tengo barco. Ya me gustaría. Aunque en realidad tampoco tengo tiempo para disfrutarlo…
P. Desde junio del 2018 es director general de la Marina Mercante. ¿Cuál ha sido su trayectoria profesional hasta llegar a este cargo?
R. Mi trayectoria profesional empezó como becario en la empresa IZAR, la actual Navantia y, al acabar mi período como becario me preparé y aprobé la oposición al Cuerpo de Ingenieros Navales y comencé a trabajar como inspector en la Capitanía Marítima de Burela. Desde ese momento he ido recorriendo puestos diferentes en la Administración española, dentro y fuera del Ministerio y de la Administración Marítima y, en la actualidad, ejerzo como director general de la Marina Mercante.
P. ¿En qué consiste su trabajo como director general de la Marina Mercante?
R. Definir todas las responsabilidades que tiene el director general de la Marina Mercante es un poco complicado, la verdad. Hay que tener en cuenta que esta Dirección General es muy amplia, abarca numerosas competencias. Pero, si hay que resumir, yo diría que en la Dirección General de la Marina Mercante nos encargamos de todo lo que tiene que ver con la seguridad de la navegación y de la vida humana en el mar y con la prevención y la lucha contra la contaminación del medio marino y también con la regulación del tráfico marítimo. En definitiva, casi cualquier actividad que transcurre en el mar de una manera o de otra se ve afectada por las decisiones que se toman desde la Dirección General de la Marina Mercante. Esa, quizás, sea la mejor forma de aproximarse a todo lo que hacemos en la Dirección General.
P. ¿Con qué presupuesto cuentan?
R. El presupuesto global de la Dirección General es de unos 410 millones de euros pero hay que tener en cuenta que gran parte de este importe se destina a sufragar el mantenimiento de la Sociedad de Salvamento y Seguridad Marítimo. Otra parte también significativa va a la gestión de las bonificaciones al transporte marítimo de ciudadanos residentes en Ceuta, Melilla, Baleares y Canarias y de familias numerosas. Eso hace que el presupuesto que se tiene asignado para programas específicos de la Dirección General sea limitado. Pero hay que tener presente que la importancia de la Dirección General no está en que maneje unos presupuestos enormes, sino en que sus decisiones y las normas que emanan de ella afectan al sector marítimo de una manera muy importante.
P. ¿Qué asuntos más importantes y de mayor interés va a afrontar su departamento para este año?
R. Este año España presidirá el Consejo de la Unión Europea en el segundo semestre. No es, por tanto, un hecho que afecta exclusivamente a la Dirección General, pero el transporte marítimo tiene mucha relevancia en la UE y eso nos va a generar una gran actividad en esos últimos seis meses de 2023. Tenemos pendiente la aprobación del texto refundido de la ley de Puertos del Estado y la Marina Mercante, confiemos en que en este tiempo vaya a las Cortes y pueda aprobarse. Y luego está el día a día, en el que tenemos que lidiar con problemas e incidentes de diversa índole, a los que tratamos de dar respuesta con toda la diligencia y la profesionalidad que somos capaces.
P. ¿Qué temas más importantes va a poner España sobre la mesa durante este mandato?
R. España es miembro del Consejo de la de la Organización Marítima Internacional (OMI) desde el año 1962 y es un miembro importante de la misma, como le he comentado. Ahora, uno de los asuntos más importantes que hemos puesto sobre la mesa es la necesidad de abordar de una manera decidida las operaciones de transferencia de carga que se están realizando en las cercanías de las aguas jurisdiccionales de los Estados. Creemos que los conocidos como STS (Ship to Ship) suponen un riesgo para el medio ambiente y la OMI debe tomar cartas en el asunto y adoptar las medidas que sean necesarias para que esta práctica no suponga un riesgo para los estados ribereños.
P. En 2023, se espera una reforma legislativa en náutica de recreo. ¿Cómo está el tema?
R. La reforma legislativa de la náutica de recreo se refiere a la inclusión, tanto en el texto refundido de la Ley de Puertos del Estado y de la Marina mercante como de la Ley de Navegación Marítima, de determinadas disposiciones que vienen a recoger las particularidades del sector de la náutica de recreo. Hasta ahora estas normas afectaban igual al sector del transporte marítimo y al de recreo; ahora, con las modificaciones normativas, pretendemos crear un marco jurídico más ajustado y más comprensivo con las necesidades del sector. Confío en que podamos ver la las normas aprobadas antes de que acabe el año.
P. De cara a los próximos años, ¿a qué grandes desafíos se enfrenta el transporte marítimo?
R. El principal reto que tiene por delante el sector marítimo es la descarbonización. Se trata de un reto compartido con el resto de sectores económicos y de actividad humana, pero para algunas modalidades del transporte marítimo las dificultades son mayores. Es un reto enorme y va a requerir una cantidad de esfuerzo, decisión e imaginación ingentes, pero nos jugamos nuestra forma de vida y el transporte marítimo no puede mantenerse al margen.
P. Medio ambiente y sostenibilidad. ¿Qué le dicen en términos marinos?
R. El medio ambiente y la sostenibilidad son requisitos esenciales para poder disfrutar del mar. El mar es atractivo por sus propias condiciones de naturaleza y si atentamos contra ella perderá el interés que despierta en las personas. Desde luego, a mí no se me ocurre pensar en el mar de otra forma que no sea desde el punto de vista de la sostenibilidad de sus ecosistemas y del respeto al medio marino.
P. ¿Qué lugar ocupa España a escala internacional en la marina mercante?
R. España tiene una flota mercante limitada, pero tiene un peso importante en las instituciones internacionales relacionadas con la Marina Mercante. Somos miembros del Consejo de la Organización Marítima Internacional desde su fundación, creo recordar, y un país activo, que defiende posiciones de diálogo, pero que apuesten por un transporte marítimo seguro y respetuoso con el medio ambiente.
P. Desde 2018 es el representante titular en el Consejo de Administración de la Agencia Europea de Seguridad Marítima y también es presidente de su Comité administrativo y financiero. ¿Qué destacaría de lo que se ha conseguido en estos años y en qué temas están trabajando ahora?
R. La EMSA ha supuesto un cambio de paradigma para el sector marítimo europeo. Nació como un proyecto limitado de apoyo a la Comisión en determinadas cuestiones técnicas del ámbito marítimo y se ha convertido en una herramienta de desarrollo al servicio de la comunidad marítima europea. Está en permanente crecimiento y creo que ha sido un caso de éxito entre las agencias creadas en el ámbito europeo.
P. La Copa América ocupará hasta octubre de 2024 todo el interés mediático en el mundo de la náutica. ¿Su departamento va a tener alguna colaboración con este evento?
R. Sí, alguna responsabilidad tenemos. El Real Decreto que regula la zona de exclusión a la navegación de la Copa América lo aprueba esta Dirección General, está ya en tramitación y esperamos que vea la luz pronto. Desde la Dirección General nos encargamos de regular las condiciones de seguridad de esta importantísima regata y colaboramos estrechamente con el comité de organización de la Copa América. Es un evento de primer nivel mundial de la náutica que contribuye al conocimiento del medio marino y a la formación de vocaciones y deseamos a la organización y a los participantes nuestros mejores deseos.