Naturgy ha culminado su iniciativa de reforestación ‘Bosque Naturgy’, su primer bosque corporativo, con la plantación de cinco tipos de árboles, -alcornoques, robles, castaños, tejos y encinas-, en una extensión de una hectárea en la zona de Cabanas (A Coruña), informó la energética.
El grupo destacó que el objetivo de este proyecto es «contribuir a la creación de capital natural, generando ecosistemas autóctonos, para luchar contra el cambio climático».
En concreto, el ‘Bosque Naturgy’ está compuesto por árboles de especies autóctonas seleccionadas mediante un estudio de silvicultura previo basado en las especies idóneas para este entorno y plantados mediante alveolos.
Así, esta iniciativa, impulsada junto con Bosquia Nature, ha recuperado zonas degradadas de Galicia y cuenta con la certificación internacional FSC, que garantiza la gestión del bosque con criterios de biodiversidad y beneficios para la población local.
Naturgy apuesta porque las soluciones climáticas vayan de la mano de la biodiversidad y el desarrollo social, por lo que centra su estrategia de absorción y compensación de emisiones en proyectos que generen una creación neta de capital natural y supongan un impacto positivo sobre la población de la zona.
PROYECTO EN CADALSO DE LOS VIDRIOS (MADRID)
Adicional a este proyecto, la energética creará también este año el ‘Bosque Fundación Naturgy’, una iniciativa desarrollada por Fundación Naturgy y con la que está previsto que se reforesten siete hectáreas en el término municipal de Cadalso de los Vidrios, en Madrid, una zona afectada por un incendio forestal en 2019.
De esta manera, se plantarán 7.000 árboles de distintas especies autóctonas que, tras un periodo de desarrollo y mantenimiento durante 50 años, favorecerán la absorción de 2.220 toneladas de CO2 de la atmósfera.
Estos proyectos están alineados con el compromiso social de Naturgy y con los objetivos de su Plan de Sostenibilidad 2021-2025, y tendrá un triple impacto positivo: ambiental, por su contribución a la conservación de la biodiversidad, la reducción del impacto climático y la generación de capital natural; social, al favorecer el desarrollo rural y la generación de empleo; y económico, ya que impulsará las inversiones sostenibles y el crecimiento local.