Reig Jofre cerró el ejercicio 2022 con un beneficio de 8,1 millones de euros, un 59,6% más que en 2021, según ha informado este martes la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Los ingresos de la farmacéutica fueron de 271,2 millones de euros en 2022, un 15% más que en 2021, mientras que su resultado bruto de explotación (Ebitda) alcanzó los 30,4 millones, un 11% más.
Por divisiones, Pharmaceutical Technologies facturó 125 millones en 2022, un 20% más que en 2021, en tanto que Speciality Pharmacare ingresó 80,4 millones (+7%), y Consumer Healthcare, 65,7 millones (+16%).
El 56% de los ingresos de la empresa procedieron de los mercados internacionales, la mitad de países con presencia de filiales propias y la mitad donde tiene acuerdos de distribución, licencia o fabricación CMO.
Las divisiones con mayor presencia exterior son Pharmaceutical Technologies –62% de ingresos internacionales– y Consumer Healthcare que, por la presencia de la marca Forte Pharma en Francia y Benelux, concentra el 75% de las ventas fuera de España.
España, que concentró el 44% de las ventas del grupo, creció un 12% en ingresos en 2022, destacando la progresión en Consumer Healthcare, con una tasa superior al 20%.
El margen bruto de la farmacéutica se situó en el 58% en 2022 (61% en 2021), «debido al mayor peso de la venta de productos con menor rentabilidad (antibióticos)», los costes de materiales en la fase de ‘ramp-up’ de la nueva planta, y la presión en los costes de materias primas y otros componentes de fabricación.
La deuda financiera neta de Reig Jofre se redujo a cierre de 2022 hasta los 62,3 millones de euros, frente a los 69 millones de euros del año anterior, mientras que la inversión acumulada alcanzó los 13,4 millones de euros.