Las acciones de Rovi lideraban las subidas del Ibex 35 con un alza superior al 6% cercanas las 11.30 horas tras anunciar un beneficio neto de 199,7 millones de euros en 2022, cifra un 30% superior a la de 2021, y mejorar el dividendo.
En concreto, los títulos de la compañía avanzaban un 6,62% y se intercambiaban a un precio de 43,46 euros.
Desde la dirección de análisis de Banco Sabadell han destacado que los resultados de Rovi dejaron una evolución operativa muy por encima de lo esperado.
«Mantenemos una visión positiva a la espera de que se materialicen catalizadores a corto-medio plazo como la firma de nuevos contratos de fabricación para terceros, la potencial mejora de su ‘guidance’ para 2023, la aprobación de risperidona ISM por la FDA (julio de 2023) y la posibilidad de M&A, dada su sólida posición financiera», han destacado desde la entidad.
Los ingresos operativos de la compañía aumentaron un 26% en 2022, hasta los 817,7 millones de euros, gracias a la «fortaleza» del negocio de fabricación a terceros, que creció un 52% en ventas, y al negocio de especialidades farmacéuticas, cuyas ventas se incrementaron un 8%.
La farmacéutica ha destacado que en 2022 superó la banda alta de sus previsiones de crecimiento de los ingresos operativos (15%-20%) al registrar un aumento de los mismos del 26%.
Según ha resaltado la compañía, las ventas de su división de heparinas (Heparinas de Bajo Peso Molecular o HBPM y otras heparinas) se incrementaron un 9% el año pasado, hasta los 264 millones de euros, en tanto que las ventas del biosimilar de enoxaparina totalizaron 152,9 millones de euros, un 23% más que en 2021.
Por su parte, el resultado bruto de explotación (Ebitda) de Rovi aumentó un 37% en 2022, hasta alcanzar los 278,9 millones de euros.
DIVIDENDO EQUIVALENTE AL 35% DEL BENEFICIO NETO
Tras estos resultados, Rovi propondrá a su junta general de accionistas el reparto de un dividendo con cargo al ejercicio 2022 y a resultados de ejercicios anteriores por importe de 1,2938 euros por acción.
Esta cantidad supone un incremento del 35% con respecto al dividendo pagado con cargo a los resultados del ejercicio 2021 (0,9556 euros por acción) e implicaría el reparto de un importe equivalente, aproximadamente, al 35% del beneficio neto atribuido consolidado de 2022.
PREVÉ QUE SUS INGRESOS BAJEN EN 2023
Para 2023, Rovi espera que sus ingresos operativos disminuyan entre 10% y 20% con respecto a 2022, aunque superarán en entre un 5% y un 10% a la cifra alcanzada en 2021.
De cara al presente ejercicio, la farmacéutica asume un nuevo escenario post-pandemia en el que el Covid sería, «previsiblemente», una enfermedad estacional y la vacuna, en principio, se administraría una vez al año.
Por ello, Rovi prevé un segundo semestre «más fuerte» que el primero en cuanto al negocio de fabricación a terceros.
La compañía espera que el primer trimestre de 2023 incluya ingresos vinculados a la producción de la vacuna en el cuarto trimestre de 2022, y que el segundo trimestre de 2023 sea el trimestre con menores ventas de fabricación a terceros.
No obstante, avisa de que la incertidumbre asociada a la evolución de la enfermedad es «muy alta», por lo que asegura que no es posible evaluar, de forma precisa, el impacto que este nuevo escenario podría tener en su negocio de fabricación a terceros.
Bajo los términos del acuerdo firmado con Moderna, en febrero de 2022, Rovi sigue invirtiendo para incrementar sus capacidades de formulación, llenado aséptico, inspección, etiquetado y empaquetado en sus instalaciones y espera que dichas capacidades estén totalmente instaladas a finales de 2024.
«Teniendo en cuenta la mencionada previsión de reducción de los ingresos operativos en 2023 y que Rovi continuará con su política de inversiones, es razonable esperar que los resultados de la compañía también se puedan ir ajustando a la baja en 2023», concluye.