La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, ha confirmado este miércoles la intención de la institución de volver a subir los tipos de interés en otros 50 puntos básicos el próximo mes de marzo para asegurar la reducción de la inflación a su objetivo del 2% a medio plazo y ha avanzado que después de este incremento, «se evaluará la vía a seguir».
Así lo ha indicado durante su intervención ante el pleno del Parlamento Europeo, donde ha reconocido que, aunque las perspectivas económicas están «más equilibradas», el BCE seguirá con su estrategia de mantener unos tipos de interés «restrictivos» porque esto evitará el riesgo de un cambio al alza de las perspectivas inflacionistas.
Esta subida elevará el precio del dinero al 3,5%, mientras que Lagarde ha avanzado que las decisiones futuras dependerán de los datos y seguirán «una pauta por reunión».
Para justificar su intención, la presidenta del BCE ha indicado que la inflación fue del 8,8%, un dato que «probablemente se revise al alza dentro de poco, cuando se tengan en cuenta los datos alemanes que no se habían incluido en las últimas estimaciones».
«Cayeron también los precios de la energía, pero el aumento anterior sigue notándose en los precios del consumo y, por tanto, la inflación subyacente sigue siendo muy alta», ha explicado, antes de detallar que, «si se dejan fueran la energía y los alimentos, la inflación se sitúa en torno al 5,5%, como en el mes de diciembre».
Lagarde ha animado a avanzar en los próximos 12 meses, antes de las próximas elecciones europeas, porque «queda mucho» por hacer en tres áreas: la integración financiera de la zona euro, las reglas fiscales y la Europa digital.
Se trata de tres proyectos de «gran envergadura» en los que ve necesario progresar para reforzar la integración financiera mientras el BCE garantiza una supervisión bancaria «eficiente y congruente».
«Hay que hacer más, sobre todo si queremos que fluya el capital y cumplir con los ambiciosos objetivos en materia de transición ecológica y digital, sin olvidar el trabajo para completar la unión bancaria», ha incidido.
En este sentido, ha instado a los legisladores a llegar «pronto» a un acuerdo para una revisión de las reglas fiscales que ofrezca un marco más «simple y predecible» y con más participación de los Estados miembro para reforzar el fundamento de la unión económica y monetaria.