La boutique Cartier de Barcelona situada en el número 82 del monumental Paseo de Gracia reabrió sus puertas a mediados del mes de Junio de 2022 con un nuevo concepto que rinde homenaje a la cultura de la ciudad Condal.
A través de un profundo diálogo entre los artesanos locales y el ADN de la Maison Cartier, la boutique, con 450 metros cuadros en una sola planta, imagina nuevos espacios con claras referencias al estilo modernista de Gaudí, creando un ambiente más contemporáneo que se impregna de la vibrante luz y el espíritu de Barcelona.
En palabras de Nicolas Helly, director de Cartier Iberia: “Para la Maison Cartier, Barcelona siempre ha sido un referente a nivel artístico y cultural y por ello queremos rendirle un cálido homenaje en nuestro espacio del Paseo de Gracia que constituirá un punto de encuentro para todos los barceloneses y visitantes de la ciudad”.
La relación de Cartier con la ciudad de Barcelona se remonta a principios del siglo XX, cuando Louis Cartier participó en la Exposición Internacional de 1929 exponiendo un fascinante collar realizado con diamantes pertenecientes al Aga Khan.
En 1996, la Maison abre su primera boutique en Barcelona en los aledaños del Paseo de Gracia, adonde se traslada en 2014 en su actual emplazamiento en el número 82. En 2022 y durante las obras de renovación de la boutique, Cartier se trasladó temporalmente a Casa Batlló, obra del insigne arquitecto Antoni Gaudí.
Gaudí, máxima inspiración
La nueva fachada acristalada que da la bienvenida a todos los clientes y amigos de la Maison, inunda de luz natural la boutique y permite descubrir las formas orgánicas y geométricas de su interior, así como una colorista paleta de colores que encontramos en diferentes vidrieras –creadas por el artesano barcelonés de adopción, Jorge Aragone– y mosaicos que jalonan los nuevos espacios. Esta sutil combinación proporciona una secuencia de formas, inspiradas directamente de la naturaleza y del universo de Gaudí, tal y como se puede apreciar en las características columnas de la boutique que culminan en un jardín interior lleno de luminosidad. Con claras referencias mediterráneas, este jardín sorprende gracias a una impresionante vidriera en su cúpula que se inspira directamente en los invernaderos del parque de la Ciutadella y en la arquitectura del Palau de la Música.
Al fondo de la boutique, los visitantes podrán disfrutar y relajarse en el amplio y luminoso jardín interior coronado por la vidriera creada por Aragone. Por otro lado, las singulares vidrieras de la entrada de la boutique rememoran la joyería de la Maison, tomando como referencia un broche creado por Louis Cartier a principios del siglo XX.
La artista del mosaico Lívia Garreta ha sido la encargada de crear los suelos de la boutique desde su conocido atelier del barcelonés barrio de Grácia. Para el pavimento ha utilizado diferentes materiales y técnicas tradicionales como el vidrio y el trencadís, con el fin de iluminar la boutique, con diferentes tonalidades de piedras flanqueadas con tonos de color oro dispuestas en formas onduladas que hacen referencia a la fluidez del mar.
La icónica pantera de Cartier contempla los contrastes de la ciudad de Barcelona desde los ondulantes bancos del Parque Güell en una escena surrealista que nos rememora la inmortal obra de Dalí a través de un bajorrelieve que domina una de las estancias principales de la boutique.
La nueva boutique mantendrá un constante diálogo con la ciudad de Barcelona, sus ciudadanos y visitantes, quienes a su llegada podrán descubrir el amplio espacio abierto que alberga las colecciones de joyería, relojería y accesorios de la Maison, como las icónicas creaciones: Love, Trinity, Juste un Clou, Santos de Cartier, Ballon Bleu de Cartier, Tank o Panthère de Cartier.