Comienza una nueva era para Alemania. Durante los últimos 16 años de gobierno de Angela Merkel, el país se ha convertido en el motor económico del Viejo Continente. Desde 2005, Alemania ha dejado de ser visto como el «hombre enfermo de Europa» para convertirse en una potencia económica. Bajo los gobiernos de Merkel, el desempleo ha descendido al 4,3%, mientras que las compañías alemanas se han consolidado como algunas de las mayores exportadoras del planeta.
En 2005-2020, el PIB per cápita alemán ha aumentado casi un 70%, un porcentaje que casi duplica el crecimiento logrado por Reino Unido e Italia durante el mismo periodo, según el Banco Mundial. Sin embargo, el país es uno de los más contaminantes, con cada alemán emitiendo unas 8,5 toneladas de CO2 por año, frente a las 6,4 toneladas de media por ciudadano en la Unión Europea.
Hoy, domingo 26 de septiembre, 60,4 millones de alemanes con más de 18 años deben votar una nueva composición de su cámara baja: el Bundestag, el equivalente a nuestro Congreso de los Diputados. Se compone de al menos 598 diputados —cifra que normalmente suele ser superior— que posteriormente deberán nombrar a un nuevo canciller por mayoría absoluta.
Se espera que ningún partido logre la mayoría absoluta para elegir al canciller para 2021-2025. Por lo tanto, durante las próximas semanas veremos negociaciones entre partidos para formar un nuevo gobierno. Estos son los candidatos a canciller de la Alemania post-Merkel.
Armin Laschet, el sucesor natural de Merkel
El conservador Armin Laschet es el candidato de la Unión Demócrata Cristiana (CDU), el partido de Merkel. Su principal objetivo es seguir por la vía continuista de la todavía canciller de Alemania. Ha sido el favorito durante toda la campaña, pero en las últimas semanas Olaf Scholz le ha superado.
Se considera a sí mismo como un centrista en lo económico, aunque prefiere mantener controlado el gasto público a través de una cauta política fiscal. En un reciente debate televisivo, se mostró en contra de aumentar el salario mínimo y de subir los impuestos a los más ricos, como propone Scholz. Esas medidas afectarían la recuperación tras la pandemia, según Laschet.
En política exterior, se le acusa de tener una postura suave con Rusia y con China. Los intereses económicos juegan un papel esencial en estas relaciones, ya que Alemania es uno de los principales importadores de gas ruso, mientras que China es una de las principales amenazas al músculo exportador de la principal economía europea.
Olaf Scholz, el ministro de finanzas quiere ser canciller
Olaf Scholz, es el candidato por el Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD) y el favorito en las últimas encuestas. Desde marzo de 2018 es el ministro de finanzas y el vicecanciller bajo el gobierno de Merkel, por lo que ha ocupado relevantes puestos de toma de decisión en la pandemia.
Quiere aumentar la inversión pública para ayudar a la economía alemana a adaptarse a un futuro más verde y digital. Ese objetivo se lograría, en parte, con más impuestos a las rentas altas.
Scholz cree que los países de la Unión Europea deben permanecer unidos para que el continente se mantenga como un jugador relevante a nivel global. También aboga por la necesidad de fomentar la cooperación con Estados Unidos y con la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Annalena Baerbock, la líder de los Verdes
Annalena Baerbock dirige los Verdes, el partido que propone avanzar en el camino para crear una sociedad ecológicamente sostenible. Con 40 años de edad, es la candidata a canciller más joven en la historia de Alemania.
Su objetivo es fomentar el desarrollo de una economía verde para combatir el calentamiento global, un asunto que cada vez preocupa a más ciudadanos tras las crisis climáticas de 2021 como las inundaciones que golpearon el occidente de Alemania en verano.
Propone aprobar cambios a los programas sociales para combatir la pobreza infantil, mientras que coincide con Scholz en que es necesario subir los impuestos para financiar la revolución verde.
En momentos de la campaña electoral Baerbock llegó a ser la mejor valorada para el puesto de canciller, pero su popularidad ha ido en descenso hasta ubicarse en tercer lugar. Se especula que podría formar una coalición de gobierno con el SPD y Die Linke (La Izquierda, en español.
Christian Lindner, la cabeza del partido liberal
Christian Lindner es el candidato del Partido Democrático Libre (FDP), un partido que apoya el libre mercado y los bajos impuestos. En ese sentido, a Linder le gustaría recortar impuestos, a la vez que reducir el endeudamiento y el gasto público a niveles anteriores a la pandemia.
«El requisito para que nos unamos a cualquier coalición es que no haya subidas de impuestos y que respetemos el límite constitucional de deuda», dijo en una entrevista con el Financial Times a mitad de septiembre. Se especula que podría ser el nuevo ministro alemán de finanzas, si el FDP llega a formar una coalición de gobierno con la CDU de Laschet.
Es el cuarto candidato en intención de voto.