El sector automovilístico europeo tiene un nuevo competidor. China quiere afianzar su posición como líder de la automoción asequible y lo hace a reprís, replicando a los referentes de las marcas de lujo de coche europeas. Ejemplo de ello es uno de sus últimos modelos, el Changan Uni-K, una copia del Porsche Cayenne Coupé, un 80% más barato que el original: solo 23.000 euros. Su nuevo mantra: aspecto occidental, precio oriental y características mezcladas.
Aunque en sus entrañas no tiene nada en común con el modelo alemán, este SUV (vehículo utilitario deportivo, por sus siglas en inglés) cuenta con un formato exterior que es prácticamente idéntico al del Porsche Cayenne. Las diferencias, una cuestión de centímetros. El vehículo chino es más corto, estrecho y alto que el de Stuttgart: 4,86 metros de largo, 1,5 metros de ancho y 1,7 metros de alto.
Su mecánica y tecnología interior no se puede comparar. Sin los motores V6 y V8 del Porsche, el Uni-K compite a la baja con un bloque turbo de gasolina con cuatro cilindros y 2.0 litros de cilindrada del que no hay cifras oficiales. Pero que en comparación con otros modelos de la misma casa se sabe que puede alcanzar una velocidad de 200-232 kilómetros por hora. Además, cuenta con una caja de cambios automática de ocho velocidades y un sistema de tracción total.
El Uni-K fue presentado como oficialmente a finales de 2020 el Salón del Automóvil de Guangzhou. Se trata del tercer modelo de la línea de vehículos Uni del fabricante chino, que también ofrece el SUV compacto Uni-T y el sedán deportivo Uni-V.