El nuevo socio de Elon Musk es uno de los emprendedores que, como él mismo, están configurando el futuro. Se llama Ma Huateng, es un empresario chino muy conocido en Asia por su app de mensajería WeChat, y porque ha levantado en menos de 20 años un conglomerado valorado en 275.000 millones de dólares (260.000 millones de euros) –casi seis veces más que Tesla–, con intereses que abarcan desde compañías proveedoras de servicios por internet (es líder mundial en ingresos por venta de juegos digitales: 10.200 millones de dólares en 2016) hasta tecnológicas. Posee Didi Chuxing, la segunda mayor empresa del mundo en servicios de movilidad, por detrás de Uber; Lyft, su principal competidor en EE UU, y empresas especializadas en el desarrollo de tecnologías para el automóvil sin conductor. Ma Huateng intuyó las posibilidades del automóvil eléctrico e invirtió en la startup china Nio (antes NextEV), con sede no muy lejos de la factoría de Tesla en Palo Alto, cuando muy pocos creían en esa tecnología.
Según los especialistas, Elon Musk, que se ha referido a su nuevo socio no solo como inversor sino también como “asesor”, ha encontrado en Tencent una especie de mirlo blanco que le podrá abrir las puertas del gigantesco mercado chino a su nuevo Model 3, y Ma Huateng a un compañero de viaje de primera fila para sus planes de desarrollo de tecnologías que están rediseñando el sector automovilístico y el futuro modelo de movilidad, incluyendo apps o la inteligencia artificial necesarias para los coches sin conductor. El objetivo de Tencent es “convertirse en la empresa más respetada de internet”, según proclama su página corporativa.
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