El bañador acartonado por el salitre. Las ingles algo irritadas. Las chanclas Havaianas. Los mercadillos. Perico Delgado y Carlos de Andrés. El maillot con puntos rojos. El Teresa Herrera. El Megatrix desde Villanueva de la Cañada. El Calippo. Los anuncios de Calippo que hoy serían censurados. Los mosquitos. La Fiesta Pagana de Mago de Oz cerrando las fiestas de cualquier pueblo del norte de España. El kalimotxo. Las hogueras. La pretemporada en Japón. Tang. Los melones Bollo. Las novelas de Petros Márkaris. Las de Camilleri. El cine a menos 10 grados. El casino. La herida en la rodilla por caerse andando entre rocas. El olor a cloro. El reguero de arena que queda en la ducha. Los parasoles color metálico. La blancura de tu zona noble. El moreno del cuello. Los flotadores estrambóticos. Los altavoces de la playa que anuncian qué niño se ha perdido. La ensalada de pasta en un tupper. Las caravanas. Las medusas. La nostalgia de la segunda quincena de agosto. Los chicles pegados al pie. Las cenas a deshora. La carrera de los 100 metros. Fermín Cacho. Mireia Belmonte. Abel Antón. Los pececillos de la orilla. Los cuadernos de caligrafía Rubio. Los fuegos artificiales. Los bodyboard de la marca Tribord. El coche como un horno. La risa. La felicidad. La tranquilidad.
Y para vosotros, ¿qué es el verano?
Feliz lunes y que tengáis una gran semana.
