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9 cosas que no son tan terribles para tu carrera como piensas

9 cosas que no son tan terribles para tu carrera como piensas

Estamos rodeados de un sinfín de normas, reglas y consejos acerca de nuestra carrera y nuestro desempeño laboral, hasta el punto de que parece que todos los trabajos son exactamente iguales, y que existe un solo camino para tocar la cima del éxito profesional. Si tomamos al pie de la letra la plantilla que todos te plantan frente a los ojos cuando haces un movimiento relativo al trabajo, podrías llegar a deprimirte si te mueves un ápice de lo que se considera ideal para mantener un buen ritmo en el empleo y procurarse un ascenso detrás de otro; sin embargo, hay varias cosas que no son tan implacables con tu carrera profesional como a menudo se predica.

9 cosas que no son tan terribles para tu carrera como piensas

Hablar sobre tus problemas. A nadie le gusta especialmente trabajar junto a una persona que se queja constantemente, pero es comprensible pasar por una situación delicada en un momento puntual. A veces tener una conversación difícil es el primer paso para obtener lo que quiere.

9 cosas que no son tan terribles para tu carrera como piensas

Obtener una revisión del rendimiento negativa. Los empleados no deberían tomar una mala valoración como un fracaso definitivo, sino como una oportunidad para demostrar que son capaces de reaccionar a ella y sorprender con una proyección siempre ascendente.

9 cosas que no son tan terribles para tu carrera como piensas

Tomarse tiempo libre. Es cada vez una costumbre más extendida renunciar a días de vacaciones debido a un extraño remordimiento. La realidad es que tener días de libertad y descanso es precisamente el único motor capaz de recargar tu energía.

9 cosas que no son tan terribles para tu carrera como piensas

Pasar por un traslado lateral. El hecho de que el movimiento no sea un ascenso no significa que sea una mala opción. Muchas veces se necesita un cambio de escenario, y desempeñar nuevas funciones en la misma empresa, con nuevos jefes y compañeros, es una receta recomendada para desintoxicarse de la sensación de estar en un callejón sin salida.

9 cosas que no son tan terribles para tu carrera como piensas

Fingir hasta conseguir tus objetivos. La idea es contraproducente, pero en realidad no es tan terrible como parece para tu carrera. De hecho, puede ayudarte a superar un problema bastante común entre los empleados, conocido como el síndrome del impostor. En lugar de fingir de cara a los demás, es útil hacerlo hacia uno mismo para plantearse nuevos desafíos y convencerse de que uno es capaz de superarlos.

9 cosas que no son tan terribles para tu carrera como piensas

No conseguir un ascenso al que se opta. Es una situación dolorosa, pero finalmente productiva si no estabas preparado para desempeñar una alta responsabilidad. En lugar de desanimarte, trabaja duro para ser la opción favorita en la próxima oportunidad.

9 cosas que no son tan terribles para tu carrera como piensas

Llorar en el lugar de trabajo. Es común que se incite a reprimir las emociones intensas, pero en ocasiones dejarlas a la vista de los demás es una manera efectiva de resolver situaciones atascadas. Un punto de partida ineludible para una conversación pendiente desde hace tiempo.

9 cosas que no son tan terribles para tu carrera como piensas

Dejar tu trabajo sin tener otro. Cortar el suministro de ingresos supone muchas veces un problema en la economía personal y familiar, pero los ambientes tóxicos, en los que uno siente que está perdiendo por completo su valía y su autoestima, empujan a abandonar una empresa. Y la importancia de tu bienestar personal pesa más que el financiero. Si acabas mental y moralmente agotado, es muy probable que transmitas una imagen de debilidad en las entrevistas de trabajo poco deseable durante un proceso de selección.

9 cosas que no son tan terribles para tu carrera como piensas

Optar por una reducción de jornada. Renunciar a una parte de tu salario y a las posibilidades de ascender podría ser, por otra parte, un trampolín. Puedes aprovechar el nuevo espacio personal para formarte, para encontrar nuevas oportunidades laborales o para hacer crecer el germen de un proyecto personal sin tener que renunciar a la estabilidad de un trabajo.

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