Algunas personas se casan con su primer amor y otras están encantadas de no hacerlo, pero a pesar de que este primer amor terminase bien o mal, tiene un gran impacto en todos nosotros, impacto que puede ser positivo o negativo.
Enamorarse puede ser maravilloso para algunas personas, pero para otras muchas representa la posibilidad de salir dañadas. Si tu primer amor fue algo traumático, y viviste un exceso de drama, puede que esas cicatrices te afecten a la hora de meterte en una nueva relación.
La sociedad juega un gran papel en nuestras vidas, y no debería hacerlo. No deberías presionarte para encontrar a alguien, porque simplemente eso no lo es todo en la vida. Puede que tengas una carrera brillante, unos amigos que hacen que tu vida social sea maravillosa, puede que simplemente no necesitas a nadie ahora.
Las personas que no saben estar solas, suelen saltar de relación en relación. Esto no quiere decir que no estén enamoradas, algunas lo están, simplemente es que su primer amor no les impactó de forma negativa y pueden caer y levantarse tantas veces como haga falta.
Otras personas se quedan estancadas, no pueden salir del pozo. Esto suele ocurrir con las personas más emocionales, las cuales han vivido un impacto negativo, y suelen pensar que no van a llegar a sentir nada como lo que sintieron anteriormente, entonces resulta ridículo volver a intentarlo. O puede ser que simplemente no quieran volver a sufrir, puede ser que hayan tenido suficiente.
Las personas de nuestro entorno nos suelen dar consejos de todas las formas y colores imaginables, pero todo depende de nosotros. Puede que sientas que puedes enamorarte una y mil veces más, o que hayas tirado la toalla, pero todo depende de ti.
Para las personas que tienen problemas para enamorarse, no tenéis que pensar que a lo mejor sois demasiado exigentes, simplemente no ha aparecido la personas que os cuadre, y de qué sirve meterse en una relación si no estás enamorado.
A veces pensamos que hemos vivido un gran amor, algo irrepetible, pero un día nos damos cuenta de que no está todo acabado, de que otro amor mejor llegará, y que si no llega es que no lo necesitamos.