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¿Por qué no nos dejan trabajar desde casa?


Porque trabajar en casa no significa tener que estar ocho horas delante del ordenador igual que en una oficina. Es muy posible que haya días que trabajes más horas que esas ocho. Y otros que menos. O que tengas reuniones de trabajo fuera de tu casa, en lugar de las que tendrías en tu oficina, que te lleven tiempo entre ir y venir. Estas son las 10 cosas claras que hay tener para trabajar desde casa .

1.- Busca tu lugar para trabajar. Da igual la terraza, el sofá, el despacho o la mesa del comedor. Es importante que lo tengas delimitado, porque de esa forma tendrás la sensación (si no has currado nunca en tu domicilio) que tienes un sitio físico donde dedicarte a hacer tus cosas.

2.- No pienses en número de horas, sino en objetivos. El domingo por la noche hazte un listado de lo que vas a hacer durante la semana y divídelo por días. Y cuando acabes lo de ese día, sean las 12 del mediodía o la una de la madrugada, deja de trabajar. Eso nos lleva al punto tres.

3.- No adelantes trabajo salvo que sea por una buena causa (tomarte un día libre, pasar una tarde con la familia…). SIEMPRE hay trabajo que hacer, así que si hoy adelantas lo de mañana y mañana adelantaras lo de pasado mañana y así sucesivamente.

4.- Ponte dos horas al día (una por la mañana y otra por la tarde) para responder mails. Salvo aquellos que tengan una urgencia inusitada, todos los demás no requieren inmediatez. Y además, contestarlos en el momento, en contra de lo que piensas, te rompe el ritmo de trabajo y hace complicado que vuelvas a concentrarte. De hecho, si lo haces así te darás cuenta que algo que ibas a hacer se te ha olvidado. Con dos horas al día tienes tiempo más que de sobra para responder correos. Ya lo verás.

5.- Usa las redes sociales, pero no las tengas a la vista mientras haces una cosa concreta. Lo mejor es que dediques cinco minutos de cada hora a mirar Facebook y Twitter. No solo por diversión, sino porque también te pueden dar ideas de negocio o ponerte en contacto con gente que te interese.

6.- Tómate descansos. Ya que estás en casa, desayuna tranquilamente leyendo los periódicos. Cuando acabes una tarea almuerza, pero no cometas el error de hacerlo delante del ordenador. Usa tu tiempo para ti. En la oficina vas a almorzar al bar y no trabajas. En casa tampoco. Y después de comer haz sobremesa y si puedes descansa un poco. Cuando vas a comer a casa no curras hasta que vuelves a la oficina. Aquí tampoco.

7.- Sal a la calle. Si no has quedado con nadie, da un paseo. O tira la basura. O ve a comprar una revista. O aprovecha para quedar con un amigo al que no ves desde hace tiempo usando tu nueva disponibilidad horaria. Encerrarse significa que entre el síndrome ‘como trabajo en casa tengo que aprovechar el tiempo el doble porque estoy lleno de distracciones’. Quita ese pensamiento de la cabeza. Te repito el punto 2: si eres productivo, tu trabajo está hecho. Y si está hecho, no tienes por qué seguir calentando el sillón de tu casa como haces en tu actual puesto. Como alternativa ponte el capitulo de una serie. Y disfruta de el sin remordimientos.

8.- Haz ejercicio. Al menos, tres veces a la semana. No solo te rompe la rutina, sino que te ayuda a aclarar las ideas y a que se te ocurran algunas nuevas. Y, si puedes, hazlo en horas donde no tengas nada que hacer. Si has acabado una tarea a las 12 del mediodía, no tengas reparos en salir a correr. Puedes llevarte el móvil y escuchar música mientras lo haces. Y si alguien te llama puedes devolverle la llamada en 45 minutos. Y no va a pasar absolutamente nada.

9.- Aprovecha para mejorar tu formación. Haz cursos on line. Hay muchísimos muy buenos hoy día. Páginas web como Floqq te ofrecen cursos que pueden ser gratuitos hasta tener un coste máximo de 50 euros, impartidos por gente que trabaja en el mundo real, no por charlatanes. Y eso también es trabajar.

10.- Y, sobre todo, disfruta los momentos familiares en casa. Si tienes hijos aprovecha tu libertad para jugar con ellos o llevarlos al cole. Todo ese tiempo es el que nos roban las empresas mastodónticas del siglo XX. Y en realidad nos pertenece. Si una compañía me pide una cosa que en teoría se tarda en hacer seis horas y se la hago en cuatro, por qué no puedo irme las dos restantes con mis niños al parque?

David Blay Tapia es periodista y ha escrito ‘¿Por qué no nos dejan trabajar desde casa?’