Para que este año sea diferente, Tim Ferriss, autor de ‘La semana laboral de 4 horas’, habla sobre algunos problemas subyacentes que nos bloquean a la hora de alcanzar el nirvana de la productividad.
¿Cuál es el mejor consejo sobre productividad que has recibido?
Cuando decides comprometerte con algo, si sientes que todo es menos que un “¡Wow! ¡Eso sería increíble!”, la respuesta debería ser no. Cuando dices que ‘no’ a muchas cosas, dejas hueco en tu vida para hacer lo que de verdad te genera expresar un “Wow” bien alto.
Hay que aprender a establecer prioridades claras, proteger tu ventaja competitiva y defenderse de las prioridades de los demás.
Una vez que has aprendido a identificar y ejecutar las oportunidades correctas, ¿cómo lograr el equilibrio en la vida laboral?
Yo soy un firme defensor de separación entre vida laboral y personal. El concepto de equilibrio entre trabajo-vida es peligroso porque a menudo el trabajo y las tareas personales se alternan en los mismos ambientes. Por ejemplo, la facilidad de localizarte ahora con los smartphones han hecho que uno mantenga su mente en la oficina 24 horas al día. Para mí, si estoy trabajando, me esfuerzo al máximo y saco el máximo rendimiento a mi capacidad, pero si he acabado, no hay quien me localice.
Cuando las personas se esfuerzan por el “equilibrio”, por lo general terminan mezclando cosas y destruyendo las fronteras.
¿Crees que “seguir una pasión” es un buen consejo profesional?
Es popular a fantasear sobre “trabajos ideales”, leer sobre ellos, y envidiar a los que han escapado de la rutina diaria para deleitarse en la carrera de ensueño. Y, sí, Internet ofrece nuevas formas seductoras de ganarse la vida. Pero, a menudo hay una verdad muy diferente.
Mezclar negocios y placer puede ser un cóctel psicológicamente tóxico. Si dependes de tu “trabajo ideal” o “pasión”, llegamos a un dilema desagradable: las cosas que solían darte placer y conseguir tu mente fuera de la oficina, ahora también forman parte de tu vida laboral. Espera mucho de la vida, pero no esperes demasiado de tu trabajo.