Los empresarios y las pequeñas empresas son el elemento vital de la economía actual. Tienen el poder de dejar huella y ser ágiles sin todo el papeleo y la burocracia que puede empantanar a las grandes empresas. Muchas de las empresas más populares y con visión de futuro están preocupadas no sólo por la creación de productos innovadores, sino también por mejorar la sociedad. Se centran en impactar al mundo de una manera positiva, incluso si es sólo en pequeña escala.
Entre los líderes más visibles de este movimiento están Ben y Jerry de The Body Shop. Además, crearon la organización/certificación BCorp con el objetivo de “proporcionar un marco y una certificación para as empresas”. Después de todo, es posible promover el cambio y la función de una manera socialmente responsable sin sacrificar los ingresos y la innovación.
Aquí hay cuatro sencillos pasos para promover el cambio social dentro de su empresa:
1. Establecer su Misión Social
Las empresas se dedicaron a establecer misiones sociales porque querían algo más que una hoja de resultados. Se dieron cuenta de que la misión social era la mejor meta. The Body Shop señala cuál es su misión: “Crear un mundo más justo y multicultural para nuestra próxima generación. Nos esforzamos por tejer la responsabilidad social en toda la compañía, y no, no somos perfectos, pero hacemos todo lo posible. Consideramos la responsabilidad social en tres áreas clave: Nuestro producto. Nuestra gente. Nuestras Sociedades”.
2. Mantén tu misión recta
Considera lo que estás vendiendo. ¿Es bueno para el mundo? ¿Es ético? Es fácil abandonar tu misión cuando te sientes estresado. Mantener la misión en las peores circunstancias puede ser tu mayor desafío, pero también podría ser tu mayor logro.
3. Construir una comunidad
Cambiar el mundo no es fácil y no es algo que se pueda hacer solo. Construye una comunidad alrededor de tus productos y servicios. Una comunidad puede ser cualquiera de tus socios, clientes, minoristas u otras empresas afines que se comprometen. Conecta y apoya a las empresas y organizaciones que tienen valores e ideales similares. Esto es algo que se puede lograr en una pequeña escala. Y no te olvides, tus clientes son tus más grandes predicadores. Con las distintas plataformas de redes sociales, nunca ha sido más fácil hacer que tus voces sean escuchadas.
4. No olvides tu equipo
Tu equipo es un ser vivo, la representación de tu empresa y tu misión para respirar. Sobre todo para las pequeñas empresas en crecimiento, puede ser fácil sentirse desesperado con más empleados, pero es importante elegir siempre muy sabiamente a tus candidatos. Recuerda lo que estás construyendo. Al fin y al cabo las empresas son sólo grupos de personas. La cultura de la empresa importa y es importante para mostrar un fuerte compromiso con el equipo que ayudó a fomentar tu misión y que la está llevando a cabo todos los días.